Alrededor de 2.600 pacientes pasaron el año pasado por las consultas de Oncología Médica del hospital Reina Sofía y más de 1.700 enfermos por las de Oncología Radioterápica, una cifra de afectados que a lo largo de las últimas décadas no ha parado de crecer, por la existencia de mejores técnicas diagnósticas, por el mayor envejecimiento de la población y por otras causas de tipo ambiental o de estilos de vida y alimentación que están incrementado la incidencia de estas enfermedades. Los cánceres que más afectan a los cordobeses son el de mama (en la mujer) y el de pulmón (en el hombre), pero si se suman los casos de ambos sexos el de colon es el que acumula un mayor número de enfermos. "La supervivencia al cáncer ha aumentado de forma significativa en los últimos 30 años, gracias a que la población está más concienciada con la prevención y a que existe una mejor accesibilidad a los medios, tecnología y especialistas. Con respecto a hace 15 años, se ha pasado de una supervivencia general en los hombres del 40% al 50% y en las mujeres del 50% al 60%, llegándose en algunos tumores, como el de mama, hasta el 90%, cuando se detecta precozmente", expone el jefe de Oncología Médica, del Reina Sofía, Enrique Aranda. "El hospital Reina Sofía, además de ser conocido fuera de la provincia por haber realizado trasplantes pioneros, se ha convertido por méritos propios también en referente andaluz y nacional en la lucha contra el cáncer, atendiendo a pacientes de la provincia de Córdoba y de Jaén, pero también de otras comunidades, sobrepasando nuestra área asistencial oncológica el millón de enfermos", señala Aranda.

En la batalla contra el cáncer no sólo trabajan las Unidades de Oncología Médica y Radioterápica. El abordaje es multidisciplinar. En la prevención, diagnóstico y tratamiento de estos pacientes intervienen profesionales vinculados a las especialidades de Radiodiagnóstico, Biología Molecular, Cirugía (General, Plástica, Digestiva, Torácica, entre otras), Medicina Nuclear, Anatomía Patológica o Ginecología. En el Reina Sofía existe un comité de tumores y varias subcomisiones clínicas para cada tipo de cáncer, en los que trabajan expertos de distintas especialidades médicas que se reúnen semanalmente para analizar los diferentes casos que les llegan, las últimas novedades diagnósticas y tratamientos, para así consensuar el mejor abordaje para los pacientes.

La evolución

Pero en los primeros años de actividad del Reina Sofía el hospital no contaba con tantos medios físicos, tecnológicos y humanos para atender a los enfermos de cáncer como ahora. A primeros de los 80 había una unidad oncológica en el Hospital Provincial, en la que trabajaba Enrique Aranda, que compartía consulta con Reumatología, y otra unidad en el Reina Sofía, a cargo del doctor Antonio García, en cuyo espacio estaba también Endocrinología. "Cuando se unificaron las dos unidades en 1985, al integrarse el Hospital Provincial en el Reina Sofía, se centralizó en el Provincial la asistencia a los pacientes con cáncer. En mi etapa en el Provincial, para la quimioterapia había 2 camas y contábamos con la colaboración de una comunidad de monjas (las Hijas de la Caridad de San Vicente de Paul). A partir de 1985, pasamos a tener 6 sillones para los tratamientos. En la actualidad, disponemos en el Provincial de 15 consultas, un hospital de día y 24 sillones para la quimioterapia, aunque serían bienvenidos más medios. La cifra de pacientes atendidos en Oncología Médica se ha multiplicado por cinco. Hemos pasado de asistir a unos 500 pacientes anuales en los inicios a los 2.600 enfermos del 2015. Además, en el Provincial hay unas 36 camas para hospitalización, entre otros recursos", explica Aranda.

En cuanto a tratamientos no se ha dejado de investigar. Ya en los años 90 se administraban los primeros ensayos clínicos en el Reina Sofía, que con el paso de los años han ayudado a curar tumores que hace décadas eran imposibles de tratar. "Ahora tenemos 52 ensayos clínicos activos. Me encuentro al frente del grupo de investigación Nuevas terapias en cáncer , del Imibic, con el que queremos tratar de lograr los últimos avances para los pacientes oncológicos. Estamos desarrollando varios proyectos de investigación, seis de mayor envergadura (en colaboración con el Instituto de Salud Carlos III, Ciber, AECC y las fundaciones Salud 2000 y de la SEOM)", precisa este doctor.

Las otras terapias

En la Unidad de Oncología Radioterápica del Reina Sofía son atendidos un 60% de todos los pacientes oncológicos que pasan por este hospital en algún momento de su enfermedad. En estas dependencias, ubicadas en el sótano del Provincial, se cuenta con diversa tecnología para administrar tratamientos radioterápicos a los enfermos, medicación que un 75% de los casos tiene un fin curativo, no paliativo. "Contamos con tres aceleradores lineales de electrones. Además, tenemos dos equipos de braquiterapia (uno de alta tasa y otro de baja, para tratar principalmente tumores ginecológicos o de próstata, respectivamente), y dos equipos de radioterapia estereotáxica, uno cerebral (para el abordaje de tumores cerebrales) y otro corporal, para cánceres pulmonares o hepáticos, como alternativa a la cirugía y con finalidad curativa", destaca Amalia Palacios, jefa de Oncología Radioterápica.

Informatización

Por otro lado, Palacios resalta que también se emplea con pacientes oncológicos un TAC 4D, "capaz de identificar el movimiento interno de los órganos para efectuar tratamientos de radioterapia más precisos" y añade que "también hemos implantado un equipo informático de integración radioterápica, que engloba todas las fases del proceso radioterápico, de forma que tenemos más capacidad para reducir errores humanos".

En Oncología Radioterápica también vienen apreciando que cada vez atienden más pacientes. "Cuando empecé a montar esta unidad hace casi 30 años, sólo contábamos con un equipo de cobaltoterapia (ya en desuso), con el que asistíamos a unos 450 pacientes/año, mientras que en el 2015 fueron 1.715 enfermos, a los que administramos 33.926 sesiones de radioterapia (con una media de 20 por persona). Este aumento de actividad requiere de un esfuerzo adicional. Los tres aceleradores que tenemos funcionan sin parar desde las 8 de la mañana hasta las 10 de la noche", indica la jefa de esta unidad. "Hoy en día ya no hay que derivar a ningún paciente que requiera radioterapia a otro hospital de fuera de Córdoba, con lo mal que lo pasaban los enfermos en esos viajes en coche a otra ciudad. En el Reina Sofía contamos con todos los medios, equipos que tienen más poder curativo y menos efectos secundarios que los de hace un par de décadas. Los 45 profesionales que formamos parte de Oncología Radioterápica vamos a seguir luchando al lado de los pacientes para tratar de vencer cualquier cáncer", concluye Amalia Palacios.