La reivindicación de que la N-432 (Badajoz-Granada) se convierta en autovía es antigua, pero hace algo más de una semana volvió a la actualidad tras el último accidente ocurrido en esta carretera. Ahora, la Dirección General de Tráfico (DGT), con la identificación de cinco tramos peligrosos en ella, viene a dar más argumentos a quienes denuncian la alta siniestralidad de esta vía. Los alcaldes del Guadiato han reclamado en los últimos días la olvidada autovía A-81 porque consideran que «la situación resulta insostenible». A ellos se han unido alcaldes como el de Castro del Río y el grupo parlamentario socialista de Granada.

La reivindicación se remonta al 2002, año en el que varios ayuntamientos de Jaén, Granada y Córdoba firmaron un manifiesto reclamando el inicio del proyecto de la autovía. Años más tarde, se presentó el estudio informativo del tramo Espiel-Granada, que fijaba el 2013 para su puesta en marcha. Sin embargo, todo cambió en junio del 2011, cuando un informe del Ministerio de Fomento recomendaba descartarla por el insuficiente flujo de vehículos y los previsibles problemas medioambientales. Más tarde hubo un anuncio por parte del Ministerio de que en el horizonte del 2024 se contemplaba la A-81, pero quedó en eso.

Ahora, políticos de distinto signo concluyen que «la necesidad de apostar decididamente por el proyecto de la autovía Badajoz-Granada es ya irrenunciable». Desde la comarca del Guadajoz añaden también la preocupación por el importante tránsito de mercancías con destino a El Cabril. El alcalde de Castro del Río, José Luis Caravaca, ha señalado que «el nacimiento de una plataforma para que la autovía sea una realidad lo antes posible parece ya imparable». R.H. / M.A.