Dos hombres de nacionalidad británica fallecieron ayer tras estrellarse un helicóptero en una zona boscosa ubicada entre las localidades mallorquinas de Andratx y Estellencs (Mallorca), concretamente, en La Trapa (Coll de Sa Gramola).

El accidente se produjo por causas que se desconocen, después de que un helicóptero con matrícula inglesa y de la empresa de charter y training , denominada Sloane Helicopters , cayera a una zona boscosa entre los citados municipios tras despegar a las 10.40 horas del aeropuerto de Son Bonet (Palma).

Así, el siniestro tuvo lugar a las 11.10 horas, después de que el aparato cayera a tierra y explosionara, a unos 25 metros del kilómetro 106 de la carretera de Andratx a Estellencs, por lo que sus dos tripulantes, uno de ellos era el propietario y comandante del helicóptero, fallecieron de manera inmediata.

Al lugar de los hechos, se desplazaron una ambulancia de Soporte Vital Básico y otra de Soporte Vital Avanzado del 061, así como un médico del PAC de Andratx, aunque sólo pudieron certificar el fallecimiento de los dos británicos.

Asimismo, se trasladaron nueve bomberos de los parques de Calvi y Sóller, debido a que la caída del helicóptero causó un pequeño incendio en la zona que fue inmediatamente extinguido y que calcinó 1.000 metros cuadrados de masa forestal en la zona de Ratjoli-La Trapa.

Por su parte, al lugar del siniestro también se desplazaron medios terrestres y áereos del Instituto Balear de la Naturaleza (Ibanat), así como un helicóptero de Salvamento Marítimo y agentes de la Guardia Civil.

Tras el accidente, el 112 puso los hechos inmediatamente en conocimiento del Consulado Británico, aplicando el convenio de colaboración suscrito con este organismo y previsto para este tipo de incidentes. Por otro lado, la directora general de Interior, Emergencias y Justicia, Isabel Febrer, se ha desplazado a la zona para poder conocer de primera mano los detalles del siniestro.

El 112 tuvo conocimiento del accidente aéreo a las 11.12 horas, cuando la Central de Gestión recibió la primera de una serie de llamadas telefónicas informando de la caída y posterior explosión de un helicóptero.

Inmediatamente, se hicieron las gestiones con el aeródromo de Son Bonet para saber qué aeronaves se encontraban volando en aquellos momentos, mientras se activaban todos los recursos asistenciales previstos en estas situaciones (SAMU, Unidad Operativa de Emergencias, SAR, Ibanat, Policía Local, Protección Civil y Bomberos de Mallorca).

Mientras, desde el aeródromo de Son Bonet confirmaron que en aquel momento tenían dos aeronaves con dos y cuatro tripulantes con los cuales no tenían contacto. Finalmente, se comprobó el hecho.