El Córdoba CF está, a día de hoy, un poco más cerca de poder garantizar que jugará la próxima temporada en Segunda División B. De hecho, después de una reunión mantenida en la mañana de este viernes, el conflicto de intereses cruzados entre los distintos actores del complejo entramado judicial que tiene atrapado al club parece haberse suavizado. A ninguno de los implicados le interesa que el Córdoba se quede fuera de la competición y, tras la primera exhibición de posturas de fuerza, llega la hora de las concesiones y la búsqueda de fórmulas de consenso.

A través de sus servicios jurídicos, Infinity -grupo que sostiene financieramente a Unión Futbolística Cordobesa SAD- y Azaveco -empresa a través de la cual Carlos González es presidente del consejo de administración de la SAD original blanquiverde- han protagonizado una reunión en la que se han logrado abrir vías de acuerdo. La semana que viene será clave para retomar y cerrar un pacto que permita que el Córdoba CF tenga clara, sin la incertidumbre por las reticencias de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), su inclusión de pleno derecho en los calendarios del próximo curso en la remodelada Segunda División B. Se trabaja sobre un plan para que el club original sea el que siga compitiendo, tal y como ha venido haciéndolo hasta ahora, aunque con el gobierno del actual equipo gestor y su respaldo financiero bareiní. La cesión de derechos se mantendría hasta que se resolviera la cuestión de la propiedad de la SAD, que abriría un nuevo escenario

¿Que SAD se inscribe?

El pasado miércoles, rozando la medianoche -y coincidiendo con el 66 aniversario de la fecha de fundación del club-, la Unión Futbolística Cordobesa (SAD) solicitó a la RFEF su inscripción en las competiciones oficiales para todos sus equipos en la temporada 20/21. Javier González Calvo, brazo ejecutor de Infinity en la sociedad, ya anunció esa determinación y el propio club, a través de un comunicado oficial, la hizo pública a la mañana siguiente. El plazo federativo para las inscripciones se cierra el 17 de agosto y González Calvo señaló que hasta dos o tres días después no se conocería la decisión de la RFEF.

Las posturas de otras partes implicadas, desde Azaveco -con González como presidente de la SAD original, desactivada ahora por la intervención judicial y concursal- hasta Aglomerados -con León ofreciendo un acuerdo para la venta de sus acciones-, pasando por la asociación de Minoritarios -ofreciéndose como mediadora y reticente ante la posibilidad de un rechazo federativo y la ausencia de un plan B-, alimentaron la incertidumbre. El escenario se tensó aún más por la postura de la Federación Española, que públicamente se mostró siempre contraria a la operación de venta de la unidad productiva y cuyos dirigentes se referían de forma ambigua al final de una fórmula que crearía un precedente en el mundo del fútbol.

Ante la situación de evidente riesgo, y después de una inversión realizada por el grupo bareiní en el Córdoba CF que, según reveló González Calvo, supera los seis millones de euros, se han intensificado -en algún caso, arrancado- las conversaciones entre los departamentos legales de las sociedades implicadas para poder articular una fórmula que permita al Córdoba CF seguir compitiendo y a los acreedores mantener sus esperanzas de cobro. No exista una única vía, aunque para salvar el escollo de la inscripción sin ningún problema se maneja la opción de que siga siendo el original Córdoba CF SAD el que siga compitiendo.

Otro asunto de fondo es el litigio por la propiedad de la sociedad, que se tendrá que decidir en un juzgado madrileño. Carlos González no tiene dudas de que es el legítimo poseedor del paquete mayoritario de acciones, ya que León dejó sin pagar el último plazo de 4'5 millones en julio de 2019. A través de sus abogados se están produciendo contactos entre Azaveco y Aglomerados, aunque en el caso de la inscripción del Córdoba CF en la Federación no tendría nada que ver el montoreño. El acuerdo entre Infinity y Azaveco sería suficiente para superar el paso de mantener al Córdoba CF en competición. A principios de la semana que viene podría quedar sellado un pacto.

Carlos González presidió el pasado martes un consejo de administración por vía telemática con los componentes que salieron de la junta celebrada en enero pasado en el hotel Córdoba Center -y que aparecen en el Registro Mercantil-, entre los que figura una representación de los accionistas minoritarios. En él se ha acordado fijar un nuevo consejo para el próximo lunes 10 de agosto para el que requerirán la presencia del administrador judicial y concursal Francisco Estepa.