Una escultura de Franco metida en una nevera, fotos de «presos políticos», una cruz gamada en un cartel de farmacia, un «ninot» del Rey... la feria de arte contemporáneo ARCO atrae periódicamente la polémica con propuestas que se mueven entre la denuncia, la provocación y el mal gusto. El año pasado, Ifema decidió, por primera vez en su historia, solicitar la retirada de una obra, la de Santiago Sierra Presos políticos en la España contemporánea, el artista que en la edición de 2019 firma, junto a Eugenio Merino, Ninot 2019, un muñeco de 4,45 metros de Felipe VI que quien compre, por 200.000 euros, tiene que quemar por contrato.

El ninot de Felipe VI ya ha recibido varias ofertas «internacionales» de compra, entre ellas la de «un museo privado de Panamá», explicaron fuentes de La Prometeo Gallery, que aseguran que no será indultado. El ninot de Sierra y Merino, el artista que en 2012 expuso Forever Franco, una escultura de Francisco Franco metido en una nevera, mide 4,45 metros de altura y está hecho con poliuretano, cartón piedra, cera y tela, la del traje azul oscuro, corbata verde y camisa grisácea que viste y que la galerista, la italiana Ida Pisani, perfuma periódicamente con la colonia que, según ella, usa el rey.

«Lo fácil», según han dicho fuentes de la galería, es que la obra se venda entre hoy y el jueves, y su deseo es que la pieza, de la que darán «la estructura de la cabeza» al comprador, se queme «fuera de España», «en un lugar privado y legal». El comprador de Presos políticos en la España contemporánea, Tatxo Benet, socio fundador de Mediapro junto al también catalán Jaume Roures, «ni ha adquirido ni tiene intención de adquirir» el ninot de Sierra y Merino, según han dicho fuentes próximas al empresario. Hoy, los reyes inaugurarán esta edición de ARCO, dedicada a Perú, y en el recorrido previsto «no ha estado nunca incluido el paso por delante de esa galería», según fuentes de la feria, y en esta ocasión los responsables han optado porque «todo continúe con normalidad».