Resulta difícil hallar en la literatura actual de nuestro país una voz tan singular, ingeniosa y valiente como la de Sergio del Molino (Madrid, 1979), un escritor relativamente joven que, en los últimos años, ha publicado algunos títulos de novela y ensayo absolutamente imprescindibles por su calidad literaria y su contenido, como, por ejemplo, La hora violeta (2013), una de las novelas más líricas y hermosas que han visto la luz en la dos décadas últimas, o su memorable ensayo La España vacía (2016), que vino a poner un foco crítico, reflexivo y sensible, sobre la memoria umbría de los pueblos y la despoblación rural de este país, ofreciendo una panoplia diversa y muy rica de puntos de vista sobre el tema. Por otra parte, después de los citados, dio a la luz otro libro, La mirada de los peces (2017), una novela arriesgada, portentosa, que toca con tacto y enorme inspiración, entre otros asuntos, el tema de la relación del autor con el profesor y activista Antonio Aramayona, cuya vida tuvo un final muy trágico. Tanto en esta novela, como en los otros libros suyos, como antes hemos dicho, todo lo escrito por Sergio del Molino alcanza un nivel difícil de igualar.
Es lo que uno comprueba al adentrarse en este último, Lugares fuera de sitio, un libro ensayístico ameno y riguroso que ha recibido hace poco el Premio Espasa, el galardón más serio y prestigioso en materia de ensayo de nuestro país, una obra que viene a mostrarnos una mirada atractiva y sensible de esos rincones y lugares que aparecen perdidos en los vértices del mapa (Ceuta, Melilla, Olivenza, Gibraltar...), como esquinas dobladas que la historia ha ido cubriendo de una pátina de óxido difícil de limpiar si no es a través de libros como éste, escrito desde el entusiasmo, la sapiencia, la melancolía y la reflexión. El volumen se abre con una cita muy oportuna del escritor y poeta Miguel Torga (una de las mejores voces lusitanas) que, de algún modo, sirve como aviso a navegantes, poniendo el acento sobre el hecho de mirar con curiosidad y emocionada sencillez el paisaje de Iberia, la tierra que pisamos y desconocemos en la mayoría de los casos, pues la historia fue deformando sus esquinas, alejando de ellas cualquier tipo de interés, condenando a esos sitios geográficos genuinos y apartados del mundo a un olvido secular. El autor de esta obra, no obstante, los rescata y nos los muestra en todo su esplendor.
Este mágico ensayo, Lugares que están fuera de sitio nos abre las rutas y los caminos más recónditos para llegar a pueblos y a ciudades donde habita el olvido, o algún día se posó de manera esencial, definiendo su estructura de esquinas dobladas por una histórica orfandad que, en muchos rincones, roza la marginación.
Dividido en capítulos sustanciosos y ágiles, fraccionado en dos partes (la primera breve e intensa, mientras que la segunda es más plural y amplia), el ensayo nos muestra u ofrece la mirada de un autor que ha pateado el país de esquina a esquina, deteniéndose siempre en esos espacios singulares que, como antes dijimos, la historia, o la desidia, incluso el silencio político o social, fueron desdibujando convirtiéndolos en parcelas de encanto sublime, sitios inéditos, esbozados en un mapa literario insólito que subyuga al lector por su autenticidad.
Resulta difícil elegir o destacar uno de los capítulos de este libro, pues todos dibujan enfoques interesantes tanto a nivel histórico como humano; no obstante, nos atreveríamos a resaltar los dedicados al Condado de Treviño, a Llivia, o a Olivenza, donde dice el autor: «No paseo por un pueblo portugués, sino por la recreación de un pueblo portugués» (Pág. 166).
Todo el libro está escrito en un estilo literario muy cuidado y muy pulcro, como vemos en estas líneas que casi rebasan la delicadeza lírica: «La carretera, el aroma de los pinos y la brisa cortante me bombardean como si un panadero loco me disparase magdalenas de Proust» (Pág. 100). Salpicado de datos históricos relevantes, de momentos sublimes por su lenguaje límpido, Lugares fuera de sitio es un ensayo que puede leerse como un libro de viajes, o, también, por qué no, como un relato literario donde aparecen como protagonistas las olvidadas esquinas de un país que aún necesita una profunda revisión a nivel histórico, político y social.
‘Lugares fuera de sitio’. Autor: Sergio del Molino. Editorial: España. Madrid, 2018.
