El Córdoba completó ayer el pago de las nóminas correspondientes al mes de mayo de jugadores y empleados, así como algunas facturas de proveedores que se adeudaban por parte de la entidad blanquiverde. La gestión ha sido posible gracias al cobro de los 720.000 euros (600.000 euros más IVA) por la cláusula del contrato de venta de Guardiola y Aguado al Valladolid, que contemplaba esa cantidad variable en caso de permanencia del Pucela en Primera División, lo que finalmente sucedió.

Por tanto, la plantilla queda al día del cobro de sus emolumentos a falta de que, antes del 28 de junio para evitar un descenso administrativo, se abone la última nómina, correspondiente al mes actual de junio, así como la liquidación de las cantidades. Hay que recordar que en muchos casos los jugadores perciben una cifra final al cierre de la temporada que forma parte de su sueldo anual.

Dentro de los problemas económicos vividos por el Córdoba esta campaña uno de los más traumáticos ha sido el de los impagos de las nóminas de los jugadores y, también, de los empleados no deportivos, colectivo este último que ha sufrido especialmente la falta de liquidez del club presidido por Jesús León. Esta falta de pagos comenzó en el mes de noviembre y se prolongó a las nóminas de diciembre hasta que se cerró la venta de Guardiola y Aguado y entró una primera cantidad en El Arcángel. Entonces, desde mediados del mes de enero, el club se puso al día con esas dos nóminas atrasadas, aunque los problemas se reprodujeron en los meses de febrero, marzo y abril. El desbloqueo del descuento de los pagarés restantes del Pucela permitió que el club fuese acometiendo progresivamente el pago, desde finales del mes de mayo, de los meses de febrero y marzo. Antes, el 10 de mayo, los jugadores del Córdoba habían denunciado la situación ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), al haberse reproducido el problema en tres meses consecutivos.

El propio presidente del Córdoba, Jesús León, explicó en su última comparecencia, el 29 de mayo, los problemas de liquidez por los que ha pasado el club y los obstáculos para el adelanto de los pagarés de la mencionada operación de venta al Valladolid. «Tuvimos dificultades financieras, íbamos justificando cada cláusula que cada entidad financiera podía poner para el descuento, pero no ha sido hasta que se ha salvado el Valladolid cuándo consideraron viable el contrato de compraventa». El club pagó un 12,5 por ciento de interés «más la comisión de José María del Nido», indicó León.

Una vez saldado ese escollo, no fue hasta ayer cuando se inició el pago de los sueldos del mes de mayo, tanto a jugadores como a empleados, así como a algunos de los proveedores. El tiempo corría en contra del Córdoba, que antes del 28 de junio debe abonar la nómina del mes de junio y la liquidación de la temporada para dejar al día a los futbolistas antes del final oficial de la temporada, el 30 de junio, que para la mayoría de ellos será la fecha final de su vinculación con la entidad blanquiverde.