Los cordobeses ofrecieron durante los dos últimos días una respuesta "masiva" a la tercera edición de la Gran Recogida, la campaña con la que el Banco de Alimentos Medina Azahara espera realizar una aportación extraordinaria a las instituciones benéficas ante la proximidad de la fiestas navideñas. En esta línea, el gerente de la entidad, Joaquín Cabello, explicó ayer que "es complicado decirlo", porque hasta dentro de una semana no tendrán una aproximación más exacta de las cantidades recibidas, pero este año "las previsiones se han vuelto a superar" y confían en rebasar los 300.000 kilos, cumpliendo con las estimaciones realizadas al anunciar esta iniciativa.

Joaquín Cabello explicó que enviaron 800 contenedores a los 155 supermercados de Córdoba y provincia que participaron, y aclaró que cada uno de estos tiene capacidad para alrededor de 400 kilos. En esta línea, apuntó que a lo largo de la jornada de ayer (la iniciativa comenzó el viernes pasado) recibieron llamadas de tiendas en las que se habían agotado estas "bañeras", pero hizo hincapié en que "aquí estamos para ayudar, no para batir récords ni nada de eso. Somos transmisores de la generosidad".

Así, esta Gran Recogida ha contado con la colaboración de unos 14 centros educativos, otras tantas hermandades, Cáritas parroquiales, grupos de Scouts, otros de voluntariado, familias y personas a título individual, así como centros de mayores regionales y municipales que "lo hacen fenomenal", señaló el gerente. En total, habían previsto que participaran unos 3.400 voluntarios y, de estos, varios centenares comenzarán una intensa labor mañana, con la clasificación de la comida en la antigua Escuela de Agrónomos de la Universidad de Córdoba, para su posterior distribución a las 254 entidades sociales con las que trabajan. El responsable de recepción y clasificación de los productos, Manuel de la Torre, recordó que el año pasado contaron con la ayuda de unas 300 personas y los alimentos recibidos permitieron que el banco estuviera abastecido hasta el mes de febrero. No obstante, la entidad realiza, además, operaciones Kilo en las que van rotando por distintas cadenas de alimentación.

De otro lado, al ser preguntado por la posible desconfianza de algunas personas ante la iniciativa, el gerente del Banco precisó que no atienden a las familias de manera directa, sino que reparten los alimentos a las instituciones benéficas, y apuntó que cuentan con tres voluntarios encargados de la relación con estas, para comprobar que reciben la ayuda que necesitan y conocer la gestión que están realizando de los recursos. En este sentido, manifestó que estos colectivos suelen contar con información de las personas a las que atienden y abundó que "si de diez casos resolvemos ocho, los otros dos allá cada uno con su conciencia".