"Ha llovido más bien poco y a destiempo", explica el ganadero Pedro Rubio ante la falta de pastos en el campo. Este profesional de 64 años de edad trabaja junto a dos hijos ("dos ganaderos apasionados", señala) diversas explotaciones de vacuno y ovino de carne, y de cerdo ibérico. Apunta que este año "ha sido atípico", ya que el otoño llegó "muy tardío y las hierbas buenas, de cabeza, no nacieron". Después de esto vino un invierno con lluvias y una primavera "cortísima", y el estado del campo ha motivado que el ganado lleve "muchos días alimentándose artificialmente, por la falta de pasto".

De este modo, Pedro Rubio destaca que desde mediados del pasado mes de julio los ganaderos tienen que suministrar a los animales "todo el alimento", porque "no ha quedado nada", mientras que en un año normal habrían comenzado a mediados de septiembre u octubre. Ante esta situación, también manifiesta que los responsables de las explotaciones tendrán que realizar un desembolso extraordinario que puede suponer un incremento de hasta el 40% y en aquellos casos en los que cuentan con seguro los ganaderos ya están solicitando las compensaciones para hacer frente a una posible bajada de la rentabilidad.

Pedro Rubio, que fue presidente de la Agrupación de Defensa Sanitaria Pedroches 1, recuerda que Los Pedroches representa en torno al 14% de la ganadería andaluza. Respecto a las previsiones para el próximo otoño, comenta que "se presenta una buena montanera de bellota" aunque dependerá mucho de la lluvia, ya que "en el otoño bueno la bellota coge los azúcares, se otoña, y aporta más riqueza calórica que la seca".