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Una compañía impagable

Los voluntarios que a lo largo del año están al lado de los pequeños hospitalizados en el Reina Sofía se organizan durante el verano para que no les falte el apoyo. Siete asociaciones lo han hecho posible

Una compañía impagable

El voluntariado infantil que habitualmente colabora con el hospital Reina Sofía para acompañar y divertir a los niños durante su estancia en el complejo sanitario mantiene su actividad en verano y se organiza para animar con juegos y talleres el ingreso de los más pequeños. Concretamente, este año han participado siete asociaciones, que han permitido que unos 150 voluntarios regalen su generosidad durante los meses de julio y agosto. Las actividades se desarrollan en la ciberaula, el aula hospitalaria, todos los días de la semana (de lunes a domingo) en horario de mañana, tarde o en ambos. Los colectivos que se han sumado este verano a la iniciativa, que también supone un respiro para los padres, son las asociaciones de Voluntarios de La Caixa, Sonrisas Azules, la asociación de mayores del hospital, la fundación Prodean, la asociación andalusí de Enfermos y Trasplantados Hepáticos de Córdoba, la asociación Cruz Roja Juventud, Asociación Aperfosa (con su programa Paracletos) y la asociación de voluntarios GEA.

Durante estos dos meses se han desarrollado talleres y proyectos variados, actuaciones, fiestas y otras actividades. Esta labor solidaria, que permite que la ciberaula se abra todos los días de julio y agosto, se coordina desde la unidad de participación ciudadana. La labor habitual del voluntariado infantil en el Reina Sofía durante el resto del año se organiza en programas que se desarrollan en el aula hospitalaria, con el fin de entretener a los niños con dificultades para desplazarse hasta el aula hospitalaria.

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