A estas alturas de la temporada, cuando quedan aún ocho jornadas para que finalice el campeonato y con la salvación en el bolsillo, el Lucena tiene la tranquilidad necesaria para aspirar a todo. Desde la humildad que siempre han demostrado tanto el equipo como la junta gestora del club, los celestes tienen la obligación de luchar por metas más ambiciosas.
La más cercana, a solo cuatro puntos, es conseguir una plaza para la próxima edición de la Copa del Rey, un bonito premio para una temporada magnífica como esta. En esa pelea se encuentran inmersos los mismos conjuntos que esperan un traspié del Cádiz para alcanzar el cuarto puesto, ese codiciado lugar que da derecho a disputar la fase de ascenso a Segunda A: Melilla, Ceuta, Ecija y Roquetas, última víctima de los lucentinos en casa.
Por lo tanto, no es tan descabellado pensar a lo grande. Además, el calendario del Lucena invita al optimismo. Si bien tiene un duelo complicado este domingo (17.00 horas) en el Ramón de Carranza de Cádiz y tendrá que recibir al Murcia, no hay que olvidar que tiene pendientes compromisos con cinco de los seis últimos equipos de la clasificación. Como dato estadístico, en este último tramo de competición en la primera vuelta, el Lucena consiguió 15 puntos. De conseguir ahora la misma cifra, tendría 60 al final de la campaña. Un número para soñar.
