El festival de humor ‘¡Cucha!’ llega a Córdoba con las entradas agotadas en todos sus espectáculos

El festival del humor ¡Cucha! llega a Córdoba este mes de febrero con el cartel de agotado en todos sus espectáculos. El evento dará comienzo el último fin de semana de febrero. El Palacio de Congresos acogerá el grueso de actuaciones si bien el Teatro Brillante será escenario del divertido show de Ismael Lemais y La Kiskillosa el 23 de febrero a las 21 horas, que regresan tras haber sido padres con Cómo conocí a mi suegra. Su espectáculo es una sucesión de monólogos cotidianos donde realizan una divertida parodia centrándose en su relación de pareja y en situaciones del día a día analizadas desde el punto de vista humorístico. 

El 23 de febrero a la misma hora, el Palacio de Congresos presenta Un punto para los locos de Ángel Martín junto a Ismael Lemais e Isita Díaz, en el que se aborda desde un punto humorístico el tema de la salud mental. El punto de partida es el siguiente: "Lo único que nos diferencia no es si estás o no estás loco, sino a qué volumen están en tu ccabeza la voz de la vergüenza, el miedo, los agobios, la impaciencia..." Ángel Martín intentará que la próxima vez que una de esas voces vuelva no puedas evitar burlarte de ella y poner en el marcador otro punto para los locos.

Comandante Lara y Juan Dávila

El sábado 24 de febrero, será el turno del Comandante Lara y Compañía, que presenta en el Palacio de Congresos Viaje con nosotros con dos funciones a las 17.30 y las 20.30 horas. El público se sentará en su asiento y recibirán las instrucciones de seguridad para poder emprender el viaje hacia el país de la carcajada de un modo divertido y fácil, para que todo los pasajeros puedan pasar el mejor vuelo de sus vidas. Todo ello con la garantía de una de la mejores aerolíneas como es AIR kejöèrsen. 

El domingo, el Palacio de Congresos recibirá a Juan Dávila con La capital del pecado 2.0. Conocido como el mesías de la improvisación, es un auténtico showman que ha creado un monólogo intenso y lleno de emociones que se sabe cómo empieza, pero no cómo acaba y que hace repaso a los siete pecados capitales para remover las vergüenzas.