EXPOSICIÓN

El guadamecí se visibiliza en el Palacio de Viana

La muestra reúne réplicas del piezas del siglo XVI

Juan García Olmedo, este viernes, junto a las obras.

Juan García Olmedo, este viernes, junto a las obras. / Óscar Barrionuevo

Bajo el título La luz de los guadamecíes del siglo XVI, el Palacio de Viana acoge desde este viernes una exposición que consta de 11 piezas con el objetivo de que los ciudadanos puedan visualizar estas obras con su apariencia original, para lo que el artesano Juan García Olmedo ha replicado una serie de guadamecíes que, en las colecciones o instituciones donde se conservan, están datados en esa fecha y como de procedencia española. Al mismo tiempo, señaló García, su diseño y forma de realización coincide con exactitud con las normas de las Ordenanzas de 1529, de los guadamecileros de Córdoba, y en cómo se describen en los contratos que se formalizan durante el siglo XVI.

«Podemos decir que estos cueros que se exponen son fiel reflejo de los que se fabricaban en nuestra ciudad en esa época», continúa García, que recuerda que las obras de guadamecí de este periodo que han llegado a nuestros días presentan un elevado deterioro con una alta degradación general del cuero, de las pinturas y, sobre todo, de la plata.

A través de seis cartelas situadas junto a las obras, el visitante puede conocer la historia de las piezas y la del propio guadamecí, del que hay referencias literarias o documentales desde el siglo XII; si bien, se conoce que a principios del siglo XI ya se utilizaba el cuero plateado. El guadamecí es la piel ovina curtida, metalizada con panes de plata y en la mayoría de los casos corlada con un barniz para que tome el aspecto de oro -Cueros dorados-, posteriormente se ferreteaba con el golpeo de hierros, con una huella en la cabeza que se traslada a la superficie plateada, para conseguir efectos de contraluz y de fondo/forma, y finalmente la obra se terminaba con los fondos policromados con pinturas al aceite.

Según señala García Olmedo, es a finales del siglo XV y principios del siglo XVI cuando se produce una expansión del guadamecí, dando paso a toda una «industria artesana» masiva de cuero metalizado y decorado. Su principal función fue la tapicería mural, en sustitución o alternativa a los textiles, convirtiéndose en un objeto decorativo con identidad propia.

Por otro lado, es comúnmente aceptado que el guadamecí tiene su origen en el sur de la península y la referencia directa de Córdoba con el guadamecil aparece en el siglo XV. Esta esposición irá acompañada de dos conferencias que ofrecerá este guadamecilero, una el día 22 de marzo en la Biblioteca Viva Al Andalus y la segunda tendrá lugar en el Palacio de Viana el día 14 de abril.