El guitarrista cordobés afincado en Londres Paco Peña ultima estos días en el Gran Teatro de Córdoba su próximo espectáculo, Quimeras , en el que une Europa y Africa a través de la música. Dirigido por la prestigiosa artista Jude Kelly, con este montaje el artista se adentra en la compleja problemática de la inmigración partiendo de su propia experiencia y combinado el flamenco con la fuerza de expresión y movimientos de la música africana.

Sobre el escenario se unirán dos culturas muy distintas: la europea, representada por el flamenco, "que es mi música", y la de los inmigrantes que llegan a Occidente, que se plasma en la interpetación de grupos africanos, aunque, según señala Peña, "no tiene por qué tratarse Africa, puede ser Asia o Sudamérica". Elementos musicales y razas son protagonistas en Quimeras , que ofrece la innovación de ver en un montaje flamenco a un nutrido grupo de artistas de color, en este caso llegados de Senegal y Guinea, que bailarán sus ritmos africanos, "aunque hay un punto en común en el que todo se fusiona y esos momentos de coincidencia son fantásticos", dice el guitarrista cordobés.

Peña asegura que, musicalmente hablando, "le debemos mucho al continente africano" y resalta que esta producción demuestra que la mezcla de culturas "es positiva". "Todo lo que traen otras culturas, que de alguna manera el mundo occidental rechaza, siempre han venido a reforzar la sociedad y a enriquecer el mundo, ese es el sentido de la obra", continúa. Todo ello toma forma en el escenario a través del viaje de una serie de personas que tiene un sueño: encontrar otra vida en Europa. En cuanto a sensaciones, Peña confiesa que "tristeza y optimismo" se mezclan en este montaje, en el que intervienen los artistas cordobeses Angel Muñoz, El Chaparro y Paco Arriaga.

La guitarra es la base del flamenco de Paco Peña, por lo que en Quimeras tiene un papel protagonista este instrumento, que acompaña a bulerías, soleás, tanguillos y alegrías, palos con los que Peña se acerca armónicamente a los ritmos africanos. Aunque reside en Londres, ha venido a Córdoba a montar este espectáculo y desde aquí viajará a partir de octubre a varios países de Europa, desconociéndose cuándo se podrá ver en la ciudad califal. "En definitiva, de lo que se trata con esta producción es de ver diferentes momentos y emociones a través de un viaje" y el objetivo es demostrar que "una sociedad mejora al llegar otros elementos raciales, musicales y sociales". Plantear emociones es el reto de Peña, que espera poder transmitir sentimientos que "nos hagan comprender que alguien está sufriendo".