A solo unas horas de que el jurado que preside Nanni Moretti haga público el reparto de premios --ya se sabe, en todo caso, que Aquí y allá, del madrileño Daniel Méndez Esparza, ha ganado el gran premio de la Semana de la Crítica--, en lo único que coinciden todas las quinielas es que cualquier película podría llevarse el gato al agua.

Pero no porque haya muchas favoritas sino porque no ha sido este un año precisamente pletórico de gran cine y, por tanto, no hay ninguna competidora que tenga un empaque de Palma de Oro. O casi ninguna.

En realidad, hay dos títulos que sí merecen alzarse con el título: 'Amour', de Michael Haneke, o 'Holy Motors', de Leos Carax. Que finalmente lo logre uno o el otro nos dirá mucho de la actitud imperante en las deliberaciones de los jueces. ¿Se habrán guiado por la razón o por los sentidos?