El escritor Alejandro López Andrada ha escogido su localidad natal, Villanueva del Duque, para la presentación de su último poemario, Las voces derrotadas , que el autor considera como "el libro de poemas más importante a muchos niveles que he escrito hasta el momento". El trabajo, que ya le ha valido la obtención del XVIII premio de poesía Ciudad de Córdoba Ricardo Molina, significa el reencuentro del escritor con la poesía después de cuatro años, si bien en este periodo ha publicados varias novelas.

Alejandro López Andrada señala que Las voces derrotadas es "un homenaje a los perdedores de la Guerra Civil española y de todas las guerras" desde la mirada inocente de un niño que vivió "en primera persona la posguerra y conoció la realidad de esas dos Españas, la que venció y la derrotada". Eso sí, el autor reconoce que este trabajo no tiene nada que ver con la política y es "un poemario limpio, de emociones y en el que cuando hablo de memoria histórica, me refiero a la memoria íntima y personal".

Según sus palabras, "se trata de una mirada a la posguerra desde el perdón y la reconciliación, sin tener en cuenta el rencor" y que dedica a tres de sus tíos, de los que uno se exilió, otro murió en la cárcel de Córdoba y el tercero pasó por un campo de concentración.

PEQUEÑOS RELATOS El autor puso de relieve la importancia de que el libro esté editado por Hiperión "que lo ha distribuido por toda España e hispanoamérica". Igualmente, apunta que esta recopilación de poemas le ha supuesto casi tres años de trabajo, que fue escribiendo paralelamente a su novela Un dibujo en el viento , e insiste en que este poemario se puede leer como una novela, por capítulos, "ya que son pequeños relatos contenidos en poemas sencillos y transparentes". En cuanto a la obtención del premio Ricardo Molina, el escritor villaduqueño mostró su satisfacción puesto que, aunque tiene premios por todo el territorio nacional, es la primera vez que obtiene un galardón tan destacado en Córdoba. En el acto de presentación participaron la alcaldesa de Villanueva del Duque, Marisa Medina, y el editor del libro, Jesús Munárriz.