COMARCA DE LOS PEDROCHES Y EL GUADIATO

Catalogan 150 construcciones de la Guerra Civil en el norte de Córdoba

El estado de conservación de búnkers y trincheras varía atendiendo a su ubicación y a su tipología 

Los autores del inventario proponen por su valor la conservación del refugio de Santa Eufemia

El refugio de Villanueva de Córdoba es el mejor conservado de la provincia y es visitable.

El refugio de Villanueva de Córdoba es el mejor conservado de la provincia y es visitable. / JULIA LÓPEZ

Un libro de patrimonio de Los Pedroches fue el germen del inventario de construcciones militares de la Guerra Civil que ha visto la luz hace unos días bajo la autoría de Pedro López Nieves, Manuel Vacas Dueñas y Pedro López Bravo y el patrocinio de la Fundación Ricardo Delgado Vizcaíno. Aquel libro propició que los autores se fijaran en las estructuras incluidas del periodo de la Guerra Civil y se pusieron a trabajar para ver si se podía ampliar ese trabajo y conseguir articular un inventario sobre estos elementos. Un año y medio después, el inventario es una realidad con tres tipos de estructuras: refugios, búnkeres y trincheras en diversos estado de conservación. 

El proyecto surge con el objetivo de que «pueda ser actualizado en cualquier momento», según explica uno de sus autores, Pedro López Nieves, quien añade que son 146 los elementos inventariados aunque con un matiz. «Los búnkeres y los refugios son elementos que están muy claros, pero en las trincheras hemos tenido que actuar de manera algo más subjetiva porque hay trincheras de un kilómetro, aunque con estructuras separadas por cincuenta metros; entonces hemos tenido que aplicar el concepto de elemento de una manera algo más subjetiva», detalla. 

Un búnker, en la localidad de Belalcázar.

Un búnker, en la localidad de Belalcázar. / JULIA LÓPEZ

Conservación

Uno de los puntos más interesantes de este inventario es el estado de conservación de las construcciones que lo componen y aquí la variedad es la tónica predominante. Pedro López apunta que los búnkeres están generalmente muy bien conservados porque son de hormigón armado y han resistido el paso del tiempo. «De refugios hay dos, el de El Viso y el de Villanueva de Córdoba, que son visitables y están en perfecto estado. Se descubrieron otros dos en Pozoblanco, pero los cegaron, hay otro en Hinojosa del Duque que lo han tapado y en Santa Eufemia tenemos constatado que hay otro. Los refugios se conservan bien, otra cosa son los accesos», explica López.

Trincheras

La situación varía respecto a las trincheras ya que están excavadas y el paso del tiempo, los sedimentos y la erosión han provocando que su estado de conservación sea muy diferente. «Hay trincheras que estaban en zonas agrícolas, de cultivo, y esas las han arrasado, las que se conservan mejor son las que están en zona de monte, hay algunas trincheras que merecen la pena visitar», señala. Entre las que destaca se encuentra la de Cerro Castillo, en el término municipal de Añora, alguna en Belmez, así como la del Viñón en Villanueva del Duque aunque apela a la responsabilidad porque «una cosa es que se visiten y otra que la gente se suba en algo que está ya de por sí deteriorado. Hay que tener cuidado y respestar estos elementos». 

Pedro López aborda, de igual modo, una posible puesta en valor de estos elementos, un tema en el que quiere dejar claro que hay cuestiones construcciones como el refugio de Santa Eufemia, «que merecerían la pena». 

¿El problema? Que hay que aunar dos elementos: la voluntad de las administraciones públicas y obtener los permisos de los propietarios, ya que muchos de estos elementos se encuentran en parcelas privadas. De momento, el inventario ya es una realidad.

Refugio antiaéreo de Villanueva de Córdoba.

Refugio antiaéreo de Villanueva de Córdoba. / JULIA LÓPEZ

Un inventario con detalles sobre cada elemento constructivo

Los búnkeres, refugios y trincheras incluidos en el inventario están perfectamente georreferenciados con sus coordinadas correspondientes. A esto hay que añadir que cada elemento tiene una ficha individual y el lector puede encontrar el tipo de elemento, la posición, la estructura, la posición de la loma, el estado de conservación y unas observaciones donde se hace una propuesta de conservación de aquellos en los que merecería la pena intervenir. Del mismo modo, se puede encontrar una pequeña descripción del elemento, así como el bando que la construyó y el entorno en el que se encuentra ubicado. 

Respecto a las fuentes utilizadas, hay un libro previo de Manuel Vacas que ya sitúa algunas de estas construcciones en ambas comarcas, pero los autores también se han servido de las pocas fuentes orales que van quedando. Sin olvidar, las fuentes bibliográficas donde han recurrido al Archivo General Militar. Luego, el trabajo de campo exhaustivo ha hecho el resto para ofrecer un inventario lo más completo posible y que se pueda ir actualizando con aportaciones que permitan enriquecer el trabajo.

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