El Ifapa (Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria, Pesquera, Alimentaria y de la Producción Ecológica) de Cabra acogió en la jornada de ayer la primera Jornada de Mujeres de la Vitivinicultura Andaluza, al objeto no solo de propiciar el encuentro, la puesta en común y la colaboración de todas aquellas mujeres que trabajan en cualquiera de los ámbitos de la vitivinicultura, sino también en hacerlas visibles por la importancia, el papel y el destacado trabajo que vienen realizando en este sector.

Así se puso de manifiesto no solo por el presidente del Ifapa, José Cara, sino también por la directora de este organismo en Cabra, Brígida Jiménez, junto al primer teniente de alcalde y delegado municipal de Agricultura, Francisco Casas, y la delegada municipal de Mujer, Pilar López. Este encuentro supone una iniciativa pionera en Andalucía, bajo la coordinación de Pilar Ramírez, responsable técnica del área de Vitivinicultura del Ifapa de Cabra, encuadrada en las actividades del proyecto Transferencia y Cooperación en Vitivinicultura Andaluza (Transviti), que cofinancia al 80% el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) a través del Programa Operativo de Andalucía para el periodo 2014-2020, y en el que se tiene muy presente la perspectiva de género, con acciones dirigidas particularmente a las mujeres.

En él, tanto mujeres responsables de bodegas como estudiantes, pasando por químicas, ingenieras agrónomas, directoras técnicas de viñedos y enólogas, entre otras, pusieron de manifiesto que, aun siendo su presencia muy minoritaria, cada vez son más las mujeres que se dedican a la vitivinicultura, no solo en los laboratorios y en la administración, sino en toda la cadena de producción, distribución y venta en un mundo tradicionalmente masculino.

La jornada, tras un intercambio de experiencias, se clausuraba con una mesa redonda en la que se abordó el presente y el futuro de la mujer en la vitivinicultura.