Casi una década después de que en 2001 la Junta pusiera en marcha el Plan de Conservación y Uso Sostenible de las Setas y Trufas de Andalucía --Plan Cussta--, dentro del que se incluía la creación del primer jardín micológico de Europa, aún se desconoce la fecha exacta de la puesta en marcha y la apertura el público de estas instalaciones, pioneras en su género y emplazadas junto a la aldea prieguense de Zagrilla.

Tal es la complejidad de este proyecto que aún restan varios flecos por resolver, el primero de ellos, nada baladí, la apertura de un camino de acceso al centro, que necesariamente deberá pasar por una propiedad particular integrada en una Unidad de Ejecución, acceso que según la información facilitada por la Junta a este Diario, en los próximos meses puede verse solucionado.

Junto a éste, otra de las necesidades que presentaba el jardín micológico era la dotación de una selección de maquinaria y herramientas necesarias para el mantenimiento y conservación de las especies vegetales y de hongos presentes en los distintos ecosistemas que se han recreado a lo largo del itinerario previsto, para lo cual la Dirección General de Gestión del Medio Natural, dependiente de la Consejería de Medio Ambiente, sacaba a concurso el suministro de dichos materiales, siendo adjudicado recientemente a El Corte Inglés S.A, por un importe de 58.338,73 euros.

De esta manera y con la llegada del otoño, la estación más idónea para la recogida y degustación de setas y hongos, podrían iniciarse los trabajos en el jardín propiamente dicho, que ocupa algo más de las tres cuartas partes de los 14.000 metros cuadrados superficie total con los que cuenta esta instalación, a la que igualmente se deberá de dotar de personal, parte del cual será aportado por el Ayuntamiento prieguense, que igualmente se hará cargo de la limpieza de las instalaciones, asumiendo la Consejería de Medio Ambiente el resto de los gastos que se deriven del funcionamiento del centro, cuya apertura completará la ya amplia oferta turística de la comarca, sector que ha depositado en el jardín micológico de Priego muchas esperanzas.