Más de 400 personas han solicitado ya formalmente algún tipo de ayuda por los daños causados por las tormentas de esta semana. En concreto, la oficina de atención a los damnificados del Ayuntamiento de Aguilar de la Frontera ha recibido ya más de 250 solicitudes de ayudas por daños causados por la tromba de agua; mientras que la de Bujalance ha registrado alrededor de 150 peticiones.

Los vecinos de Aguilar continúan tratando de recuperar la normalidad y siguen adelante con las tareas de limpieza. El delegado de Agricultura de la Junta en Córdoba, Francisco Zurera, vecino de Aguilar de la Frontera, destacó ayer el "alto grado de colaboración" prestado por todas las administraciones en los municipios afectados por la tromba de agua, que provocó la muerte de tres personas, dos en este municipio y un tercero en Bujalance. Zurera valoró ayer la rapidez con la que se actuó "desde el primer momento y recordó la visita del presidente de la Junta, José Antonio Griñán, quien puso a disposición de las autoridades aguilarenses y los vecinos los medios de la Junta de Andalucía, entre los que se cuentan las 22 personas contratadas para las labores de limpieza.

Por su parte, el alcalde de Aguilar de la Frontera, Francisco Paniagua, cifró en más de 250 familias las afectadas por las fuertes lluvias y ha agradecido el trabajo y la colaboración prestada por la Diputación y la Junta. La oficina de atención a los damnificados, ubicada en el Consistorio, está siendo atendida por tres personas que trabajan en turnos de mañana y tarde y continuarán desempeñando esta labor el tiempo que sea necesario.

BUJALANCE Los operarios municipales y cuadrillas contratadas de desempleados continúan con la labores de limpieza de calles y polígonos industriales en Bujalance. Además, ha comenzado el achique de agua y la limpieza de la Parroquia de San Francisco, que estaba totalmente inundada.

Por su parte, el Ayuntamiento, a través de los servicios técnicos de arquitectura, está realizando la cuantificación de los daños sufridos por instalaciones e infraestructuras municipales, así como por viviendas particulares. Además, la oficina de información y reclamación a los afectados, que está siendo atendida en horario de mañana y tarde, se han atendido ya a más de 150 afectados, de los cuales, cerca de cien ya han formulado formalmente su escrito y petición de reclamaciones. En cuanto a las infraestructuras, los técnicos municipales consideran que una veintena de casas particulares tienen gravemente afectadas las techumbres o las medianías, o sufren alguna rotura o caída de sus muros.

Los que también han cuantificado sus pérdidas han sido los responsables de la Cooperativa Olivarera Jesús Nazareno, que aseguran que los daños en el campo son cuantiosos. En cuanto al olivar, se estima que se ha perdido al menos el 10% de la cosecha por la caída de aceituna o de ramas. Además habrá que arar de nuevo las tierras y pasar el rulo, lo que aumentará los gastos de esta cosecha. También han sido cuantiosos los daños en caminos y en las alpechineras, que han sido destrozadas. El alcalde, Rafael Cañete, pidió ayer a todos los bujalanceños seguir trabajando para volver a la normalidad, mientras que desde la Junta se garantiza que la recolección de la uva --lo más inminente en el campo-- está garantizada.