La inflación se estanca en Córdoba con una subida del 0,2% en los precios durante febrero

La inflación permanece estancada en Córdoba gracias a la evolución de los precios durante el mes de febrero. El IPC (Índice de precios de consumo) se ha quedado en un 0,2 por ciento mensual y apenas ha registrado un crecimiento del 0,3 por ciento en lo que va de año. Son datos relativamente buenos desde un punto de vista estadístico y económico si se comparan con el dato interanual (desde el mismo mes del año pasado), que alcanza un 3,3 por ciento.

El Instituto Nacional de Estadística ha hecho públicos este jueves los registros de la evolución de precios durante el pasado mes de febrero, que se ha comportado dentro de unos parámetros normales y ya lejos de la crisis inflacionista de hace dos años, cuando comenzó la guerra de Ucrania y una subida generalizada del coste de la vida.

La inflación de los alimentos se modera en España hasta el 5,3% en febrero y deja el IPC en el 2,8%

Sectores

Por sectores, el que más ha sufrido el encarecimiento es el del tabaco y las bebidas alcohólicas, que aumentó un 2,1 por ciento, seguido de los transportes con un 1,4 por ciento. Por el contrario, ha habido productos de la cesta de la compra que han bajado de precio en febrero, como es el caso del vestido y el calzado (-2 por ciento) o todo lo relacionado con la vivienda (-1,7 por ciento).

Existen enormes diferencias entre sectores al comparar la inflación mensual de febrero y la interanual, que muestra mejor la tendencia al analizar un año completo. Es ahí donde se nota cómo uno de los factores que más interesa a los ciudadanos sigue siendo el principal responsable de inflación: los alimentos. Ahí es difícil recortar en la cesta de la compra.

Los alimentos

En febrero, y siempre teniendo en cuenta únicamente la provincia de Córdoba, los precios de lo que comemos y bebemos (excluyendo el alcohol) bajaron un 0,3 por ciento de media, una de las escasas caídas en los dos últimos años, si bien el sector sufre grandes oscilaciones dependiendo de las campañas de producción y de otros factores externos. En ese mismo periodo, ha habido meses en que los alimentos han subido más de un 5 por ciento en sólo 30 días.

Por el contrario, la inflación interanual en los alimentos se queda en un 6,9 por ciento. Ese dato, aunque revele un incremento, resulta esperanzador. Por primera vez desde que comenzó la escalada de precios, a comienzos del año 2022, se han recuperado los valores de entonces: en marzo de ese año la inflación interanual en los alimentos estaba en el 7,1 por ciento.

A mediados de 2022 se alcanzaron números críticos, con una inflación en la alimentación que se mantuvo en el entorno del 16 por ciento interanual durante todo un año. Sólo a partir de la primavera del año pasado se invirtió la tendencia alcista, en parte debido al control de otros factores que influyen directa e indirectamente en la producción agroganadera, como los combustibles o la electricidad.

Sin embargo, la subida en los precios de la comida y la bebida está aún lejos de los valores previos a la crisis inflacionista, cuando se movía en un entorno que rara vez se movía por encima del 2 por ciento interanual. Incluso llegó a quedarse en la barrera del 0 por ciento, con algún mes por debajo (deflación), en lo peor de la pandemia.

Otros sectores

El calzado y la vestimenta es un sector muy estacional, con enormes fluctuaciones de precio que coinciden con las campañas de rebajas, a pesar de que desde hace años ya no están reguladas y se pueden realizar en cualquier momento. Pero aún persiste en el consumidor la tendencia a gastar más en periodos como la Navidad, lo que hace que suban los precios en las fechas previas para bajar bruscamente en los meses siguientes. Así ocurrió con la inflación en este apartado el mes pasado, que ya se ha corregido en febrero al quedarse en una bajada del 2 por ciento.

Otro dato avala la estacionalidad del mundo de la moda: mientras que los precios de estos productos han caído un 13,4 por ciento en lo que va de año, coincidiendo con las rebajas y descuentos de los establecimientos, el dato interanual se mantiene en una subida del 0,1 por ciento en la provincia de Córdoba, muy lejos del 3,3 por ciento del índice general.

La vivienda, que incluye conceptos que el consumidor nota directamente en su bolsillo como la electricidad, el gas o el agua, bajó un 1,7 por ciento en febrero en Córdoba y corrobora la tendencia a la baja. El índice interanual es este ámbito, de hecho, es el único que baja y se mantiene en un 1,6 por ciento de caída en los últimos doce meses.

En febrero, los artículos para el hogar y el mundo de la educación se mantuvieron estables sin subidas ni bajadas, mientras que aumentaron sus precios la sanidad (0,1 por ciento), el ocio y la cultura (0,6), los restaurantes y hoteles (1) y otros bienes (0,2). En cuanto a las bajadas, al margen de los sectores ya mencionados, sólo se detectaron en las comunicaciones (-0,1).