análisis

Los congresos y el aeropuerto son claves para la calidad del turismo en Córdoba

El CEFC y el palacio de Torrijos potencian la capacidad del turismo de negocios

La reforma de la terminal permitirá que el aeródromo gane interés para las compañías

Pasajeros en el aeropuerto de Córdoba el día de la salida del avión a Praga.

Pasajeros en el aeropuerto de Córdoba el día de la salida del avión a Praga. / MANUEL MURILLO

Noelia Santos

Noelia Santos

Que Córdoba cuente con el Palacio de Congresos y el Centro de Exposiciones, Ferias y Convenciones (CEFC) y con un aeropuerto preparado para acoger vuelos regulares es una de las mejores noticias para el sector turístico. Son dos piezas clave que llevaban años añorándose por el salto de calidad que suponen para la ciudad.

El turismo de congresos, de negocios o MICE (por sus siglas en inglés: meetings, incentives, conferences and exhibitions) es «el que más contribuye a desestacionalizar el turismo», explica el presidente de la Asociación de Organizadores de Congresos de Córdoba, Francisco Gordejo. Ocurre porque la mayoría de los congresos se desarrollan entre semana y contribuyen así a mejorar la estancia media. Además, el turista de negocios se gasta más dinero que el vacacional. Según Gordejo, los datos a nivel nacional ponen de relieve que «el turismo de sol y playa, a finales de 2023, había tenido un gasto medio de 146 euros al día, el MICE llegaba a los 335 euros es una diferencia muy importante». A ello hay que sumar que muchas veces el turista de congresos se torna en vacacional, bien porque se queda un día más para disfrutar de la ciudad donde se ha celebrado el evento o porque vuelve con sus familias o sus amigos. Según datos de la asociación cordobesa, en torno al 32,3% de los asistentes a un congreso o bien se quedan algún día adicional o repetirán y volverán a Córdoba acompañados de sus familias o de sus amigos.

Un salto cualitativo

Para el presidente de la asociación, el contar con el CEFC y con el Palacio de Congresos de la calle Torrijos ha supuesto dar «un salto cualitativo importante en la disponibilidad de infraestructuras para posibilitar congresos de mediano y gran dimensión» que ha derivado en que, en Córdoba, «hemos incrementado la capacidad competitiva de sedes disponibles y esto se está notando en los datos». Como recuerda Gordejo, el CEFC y la actividad que acogió durante el año pasado generaron un impacto económico de más de diez millones de euros y, a falta de cerrar los datos de Torrijos, también se produjo un aumento de la actividad con respecto al año anterior (ya está completamente acabado). A ello hay que sumar, recuerda, todos aquellos hoteles que tienen espacios dedicados al turismo de congresos.

El vuelo a Praga despega del aeropuerto de Córdoba

El vuelo a Praga despega del aeropuerto de Córdoba / MANUEL MURILLO

Planificación

Pero, como ocurre casi con cualquier cosa, no todo es de color de rosa. Gordejo recuerda que está pendiente la creación del Córdoba Convention Bureau para contar con «una plataforma que pueda mantener al tanto al turista de negocios sobre el evento al que acude y lo que pasa en la ciudad y tenga posibilidad de utilizar su tiempo en conocerla». En este punto, añade que es necesaria «la promoción segmentada, llegar a clientes específicos a través de canales adecuados para conseguir captar esos congresos».

El aeropuerto

Todos las fuentes consultadas para este análisis turístico señalan que el aeropuerto podrá suponer un antes y un después para el sector. Pero que así sea, recuerda Ricardo Hernández, profesor de la Universidad de Córdoba, «el avión que se va de aquí lleno de cordobeses tiene que regresar lleno de turistas». Aun así, Hernández entiende que el aeródromo supondrá «un punto y aparte» y habla de hacerlo «internacional» y, a partir de ahí, conseguir otro de los retos que tiene ahora mismo Córdoba, recuperar al turista extranjero y centrarse en destinos que hasta ahora no estaban siendo muy explotados, como Marruecos, que está empezando a crecer y que, además, está muy cerca.

La importancia del aeropuerto también la destaca Manuel Fragero, de la Asociación de Empresarios del Hospedaje, que cree que en esa senda del crecimiento juega un papel muy importante el aeródromo y también la potencialidad en el turismo de negocios. «Si somos capaces de llegar al rango medio de otras provincias como Sevilla, Málaga o Granada y somos capaces de recuperar al turista extranjero, volveremos a nuestro mejor momento», considera Fragero.

Eso sí, al aeropuerto le queda todavía mucho por recorrer. Entre sus carencias es que no puede acoger vuelos fuera de la Unión Europea porque carece de control de pasaportes. Aena está ahora ampliando la terminal para mejorar el servicio y que el aeropuerto sea más competitivo de cara a las aerolíneas que quieran operar en él. Varias de esas aerolíneas consultadas por este periódico ya han manifestado su interés por instalarse en Córdoba, pero la concreción todavía no ha llegado. De momento, en diciembre salió un vuelo chárter a Praga fletado por Mapatours que volverá a comercializar otro en verano con destino Basilea.

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