Medio Ambiente

La Junta busca ovejas para pastorear en los Sotos de la Albolafia

Comienza una nueva campaña de desbroce y limpieza en la zona protegida entre puentes del Guadalquivir

Un niño ciego del colegio Santuario ayuda a soltar un avez rapaz en los Sotos de la Albolafia este miércoles.

Un niño ciego del colegio Santuario ayuda a soltar un avez rapaz en los Sotos de la Albolafia este miércoles. / Francisco González

Rafael Verdú

Rafael Verdú

La Junta de Andalucía, a través de la delegación de Medio Ambiente y Economía Azul, ha comenzado ya una nueva campaña para limpiar los Sotos de la Albolafia, ese espacio asilvestrado que discurre entre los puentes Romano y de San Rafael y que sirve de lugar de anidamiento y reposo de cientos de especies de aves. En esta ocasión, la Administración apuesta por medidas innovadores y sostenibles que, además, son más baratas y respetuosas que meter una desbrozadora en un espacio protegido.

El delgado del ramo, Rafael Martínez, ha explicado en la mañana de este miércoles que la intención de la Junta para el próximo año es contar con pastores y ganado que se alimente de todas las malas hierbas que pueblan la zona, algunas de ellas invasoras. "Estamos pidiendo voluntarios a ganaderías de vacuno y ovino para que pastoreen" en los Sotos de la Albolafia, ha dicho el responsable de la Junta.

El plan de actuación de Medio Ambiente en este espacio protegido tiene varias líneas de actuación, como el desbroce, la poda, el control de pedregales o la retirada de basura. Algunas de las zonas de los Sotos de la Albolafia, cuya vegetación crece sin restricciones gracias al aporte del agua del Guadalquivir, son de difícil acceso. Ahí es donde tiene sentido que entre el ganado, que puede hacer el trabajo de una o varias cuadrillas "de forma ecológica y gratuita", en palabras de Martínez. 

Suelta de aves

Por otro lado, el delegado de Medio Ambiente ha participado esta mañana en la suelta de varias aves en los Sotos de la Albolafia, procedentes del Centro de Recuperación de Especies de Los Villares, en la que han colaborado también alumnos del colegio Santuario. Cada año el CREA de Los Villares recibe unos 600 ejemplares de aves que han sufrido algún tipo de daño, especialmente por caídas de los nidos o por colisiones. El 60 por ciento de esos animales pueden recuperarse lo suficiente como para devolverlos a un entorno natural.