La obesidad se duplica en la última década y afecta ya al 30% de cordobeses

Un 30% de la población cordobesa, algo más de 200.000 personas, presenta obesidad, una cifra que se ha duplicado en la última década, señala la especialista en Endocrinología y Nutrición del hospital universitario Reina Sofía Conchi Muñoz. Muñoz precisa que la obesidad ha desplazado al sobrepeso en incidencia, pues antes había más personas con un ligero exceso de calorías, pero ahora existe más obesidad. 

Esta especialista del Reina Sofía sostiene que el incremento progresivo de la incidencia de la obesidad en los últimos años se ha visto acentuado además durante la pandemia del coronavirus, debido fundamentalmente a que una gran parte de la población abandonó durante esos años los saludables hábitos de alimentación, que constituyen la dieta mediterránea, tomando una mayor cantidad de proteínas animales y productos con azúcares refinados (refrescos, bollería) y obviando comer frutas, verduras o legumbres. 

Más mujeres afectadas

Muñoz recalca que la obesidad afecta más a las mujeres, que son además las que consultan a su vez más por esta situación. La población que presenta más obesidad es la que tiene entre 30 y 60 años, aunque se están detectando cada vez más casos entre la población infantil y juvenil. En lo que respecta al índice socioeconómico, la obesidad ha venido afectando siempre más a personas con menos recursos, aunque se da en todas las esferas de la sociedad, recalca. 

Auge de casos en niños y jóvenes

Esta especialista en Endocrinología y Nutrición alerta acerca del auge de casos de obesidad infantil y juvenil, que están suponiendo unas consecuencias muy negativas en la salud de personas que aún están en fase de crecimiento, siendo en algunos casos estos efectos tan perjudiciales o incluso peores que los que sufren obesidad a partir de los 50 años.  

Conchi Muñoz precisa que la obesidad se está diagnosticando en niños a partir de los 10 y 12 años, de ahí que los expertos en nutrición consideren fundamental que se incremente la educación sobre una adecuada dieta en la población infantil y juvenil, para evitar que menores desarrollen enfermedades propias del adulto, como diabetes tipo 2 o problemas cardiovasculares, entre otros.

Publicidad que incita a comer más

Muñoz indica que, a pesar de que cada vez la población tiene a su disposición más información sobre la comida que es saludable y la que no, de forma paralela existe una avalancha de publicidad y una creciente oferta de locales donde se sirve comida menos saludable, lo que puede estar influyendo en un mayor consumo de la misma. Esta doctora advierte a su vez de que las raciones de la llamada comida basura, por su poco aporte nutricional, son además cada vez más grandes, incitando incluso a comer dos productos por el precio de uno, lo que consecuentemente supone una ingesta de calorías muy superior a lo que el cuerpo necesita.

Ante este panorama, esta especialista insiste en que es necesario que una adecuada información nutricional, basada en la dieta mediterránea, se dé a conocer desde temprana edad, tanto en los colegios como en el núcleo familiar.

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