El gobierno local negocia estos días con la oposición el destino de 35 millones de remanentes que el Ayuntamiento de Córdoba tiene a su disposición (44 millones en el presupuesto consolidado). El teniente de alcalde de Hacienda, Salvador Fuentes (PP), aspira a cerrar por tercer año consecutivo en este mandato un acuerdo global --solo en 2020 se descolgó Vox del consenso-- sobre los remanentes con los grupos de la oposición y ha iniciado ya para ello los contactos con los portavoces municipales. El edil ya se ha reunido tanto con Vox como con Izquierda Unida y espera hacerlo en los próximos días con PSOE y Podemos.
La idea inicial del gobierno de José María Bellido es destinar en torno a 20 millones a cobertura social, impulso de la actividad económica y empresarial y a las empresas municipales, y el resto, es decir, unos 15 millones, a amortizar deuda. Los remanentes deben gastarse técnicamente antes del 31 de diciembre, por lo que la oposición pide realismo en las propuestas y proyectos que se planteen. Todo lo que no se ejecute en plazo pasa directamente a enjugar la deuda bancaria del Consistorio.
En este sentido, la convocatoria de ayudas a empresas y autónomos, que el Imdeec ha repartido durante estos meses en base a los remanentes del 2020 (unos 5 millones), o las ayudas al alquiler social de Vimcorsa son iniciativas que cumplen sin problemas con los objetivos y los plazos.
Más dificultades tienen proyectos que implican obras y plazos de licitación que se dilatan en el tiempo. El año pasado se incluyó la construcción de pistas deportivas en Sector Sur y Parque Cruz Conde (50.000 euros) y otros 50.000 para los aparcamientos provisionales en el solar del polideportivo de la Juventud, que finalmente no se han hecho. Otras iniciativas, como el bono comercio, al que se destinaron 400.000 euros de los remanentes, ha terminado saliendo adelante en el mes de mayo por problemas administrativos y ya con otras partidas presupuestarias.
Por segundo año consecutivo y ante la situación de crisis, el Congreso de los Diputados ha suspendido las reglas fiscales a las que están sometidos los ayuntamientos. Esta suspensión permite a los municipios poder seguir haciendo uso del remanente de tesorería del que disponen y destinar partidas a diferentes servicios municipales sin apenas cláusulas de restricción. En 2021, el alcalde anunció un acuerdo de remanentes el 23 de junio y en el pleno del 27 de julio se aprobaron las partidas. La idea que tiene el gobierno municipal es poder llevar al pleno del día 14 el acuerdo de este año, aunque podría retrasarse.
Propuestas de Vox
De momento, públicamente, solo Vox ha dado a conocer sus exigencias para un acuerdo con PP y Cs sobre remanentes. La portavoz, Paula Badanelli, ha solicitado que sirvan para rebajar la deuda e inyectar dinero a las empresas municipales, que a su juicio son las que han demostrado mayor capacidad de gestión. «Ya que el gobierno municipal ha sido incapaz de gestionar los remanentes del 2020, se destinen en su totalidad a rebajar la deuda y a inyectar dinero a las empresas municipales», dijo.
