La ciudad de Córdoba va a terminar el año 2021 siendo propietaria de un edificio largamente esperado: las Caballerizas Reales hasta ahora propiedad del Ministerio de Defensa. El histórico inmueble ha albergado esta mediodía la firma del acta de ocupación y el pago simbólico del edificio por parte del teniente coronel de Artillería, jefe de Patrimonio de Córdoba y Jaén, Antonio Ruiz González, en representación del Ministerio de Defensa, y del alcalde, José María Bellido, en nombre de la ciudad. Se trata de un acto de gran simbolismo para la ciudad, que ya es titular del inmueble aunque deberá esperar a poder inscribirlo en el registro de la propiedad cuando culmine el proceso expropiatorio. En cualquier caso, a partir de hoy el Ayuntamiento puede ocupar el edificio y “ya es patrimonio de la ciudad de Córdoba”.
El alcalde ha asegurado que “hoy es un gran día para la ciudad de Córdoba, que quedará en un pequeño rincón de la gran historia de nuestra ciudad, porque después de décadas buscando soluciones para que este edificio fuera titularidad, patrimonio de todos los cordobeses, hoy se ha dado un paso definitivo con la firma del acta de ocupación”. Además, el regidor ha recordado que con la rúbrica en 2021 se respeta “el acuerdo entre caballeros” que había entre el Ayuntamiento y Defensa para que se cerrara todo antes de final de año.
El alcalde Bellido puede ser quien ponga fin al culebrón sobre la titularidad de un inmueble que en la actualidad está siendo gestionado por una tercera entidad: Córdoba Ecuestre, la asociación encargada del espectáculo Pasión y duende del caballo. La gestión futura del inmueble también deberá dilucidarse cuando pase a titularidad municipal, si bien el regidor popular se ha mostrado hoy de nuevo a favor de la continuidad del proyecto de Córdoba Ecuestre y de la implantación de un Centro Internacional del Caballo. Además, está en ciernes convertir la primera planta de Caballerizas en un espacio para el arte contemporáneo. “Estoy muy satisfecho de acabar el año de esta forma y de que la ciudad cumpla un deseo común: recuperar este edificio”, ha añadido el alcalde que ha agradecido a la ministra Margarita Robles su papel con Córdoba, así como los esfuerzos de dos personas claves en la negociación: el coronel Íñigo Laquidain y el teniente de alcalde de Urbanismo, Salvador Fuentes.
La firma del acta de ocupación pone fin a un largo proceso administrativo que aún debe seguir dando pasos hasta culminar en la expropiación forzosa de Caballerizas Reales, el método elegido para tratar de descongestionar una situación atascada desde tiempos de José Antonio Nieto. De momento, el Ayuntamiento de Córdoba ha firmado el pago al Ministerio de Defensa de un justiprecio provisional de 1.912.376 euros, incluido el 5% de afección. Esta cifra, que se ha ingresado en una cuenta del Banco de España, será provisional y queda pendiente de la fijación definitiva que le dé la Comisión Provincial de Valoración. Este será el órgano administrativo externo encargado de fijar el valor de la transacción, dado que Ministerio y Urbanismo no se han puesto de acuerdo en el precio y acuden, por ese motivo, a la expropiación forzosa. Los propietarios actuales estiman que su valor supera los 10 millones, mientras que el Ayuntamiento habla de 2 millones habida cuenta de las inversiones y obras de mejora realizadas desde que se hizo cargo del inmueble. Este procedimiento ha contado con el beneplácito de todos los grupos municipales excepto IU y Vox, que votaron en contra en el consejo de administración de la Gerencia Municipal de Urbanismo.
El titular de la asesoría jurídica del Ayuntamiento, Miguel Aguilar, impulsor de la idea de la expropiación ha explicado hoy que es muy posible que el precio que fije la Comisión Provincial de Valoración tampoco sea el definitivo y que ambas partes o una recurra de nuevo ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Caballerizas Reales forman parte del patrimonio del Ejército desde 1866, cuando se decidió crear el Depósito de Sementales. El Ministerio de Defensa abandonó el monumento en 1995 cuando desplazó el equipamiento de cría caballar a la ciudad sevillana de Écija.
