La reforma de la antigua Normal de Magisterio sigue estando viva en los juzgados. El Juzgado de Instrucción número 3 de Córdoba ha dictado una sentencia que rebaja de más de un millón de euros a poco más de 36.500 euros la cantidad que deberá abonar la Gerencia Municipal de Urbanismo por los retrasos de las obras que se dieron por finalizadas en el 2019. El fallo judicial solo percibe una demora de cinco meses imputable al organismo municipal, que tendrá que pagar mucho menos dinero que el que le reclamaba la empresa adjudicataria, Vías y Construcciones.

La adjudicataria interpuso un recurso contra la presunta desestimación por silencio de la reclamación presentada en abril del 2018. En esa reclamación Vías y Construcciones solicitaba la recepción de las obras, la emisión de la certificación final y el abono de los sobrecostes motivados por los retrasos en la ejecución de los trabajos imputables, según manifestaba, a Urbanismo, que negaba los argumentos de la empresa. De las tres peticiones, dos se han producido, ya que las obras fueron recepcionadas en el 2019 por Urbanismo y se emitió la certificación final.

A pesar de que la adjudicataria percibe que Urbanismo incumplió los plazos en tres ocasiones por distintos motivos, el fallo judicial solo detecta ese incumplimiento en cinco meses, de ahí la rebaja en la indemnización y que esta se quede solo en los 36.515 euros. "El único motivo que justificaría apreciar un incumplimiento culpable de la GMU en el primer periodo descrito vendría determinado por la tardanza en la tramitación del modificado y que ello pudiera considerarse causa exclusiva del retraso acumulado", indica la sentencia, de la que tomará conocimiento mañana en consejo rector de Urbanismo, que, al ser favorable a sus intereses, acordará su acatamiento. El fallo no es firme y se puede recurrir ante el TSJA.

Las obras de la Normal empezaron en enero del 2014 y debían estar acabadas en abril del 2015, pero, al poco tiempo de iniciarse, quedaron paradas por discrepancias entre Urbanismo y la adjudicataria. Sin embargo, no fue hasta noviembre del 2019 cuando se dio por terminada la reforma, incluida dentro del plan Urban Sur, aunque gran parte de la misma se sufragó con fondos municipales al no haber estado a tiempo y tenerse que reprogramar. Aunque tuvo otros altibajos, al final de la reforma volvieron las diferencias entre Urbanismo y la adjudicataria, lo que provocó que se alargara la recepción de las mismas. Durante un tiempo Urbanismo se negó a recepcionar los trabajos por las deficiencias detectadas.

El edificio lleva abierto más de un año aunque no se está usando la totalidad del mismo. Parte del inmueble está ocupado por el área de Transformación Digital, pero aún le faltan dependencias por utilizar. Hace poco quedó abierta la biblioteca, que se inauguró después de lo esperado por un informe que desaconsejaba su puesta en marcha.