El alcalde de Córdoba, José María Bellido, ha vuelto a llamar a la prudencia y a la tranquilidad pese al incremento de casos de contagio de covid de los últimos días, pero advierte que a pesar de que seguirá esa tendencia de crecimiento de positivos -entre otras cosas por las condiciones climatológicas y los hábitos sociales asociados a ellas— no ve en el horizonte “situaciones que impliquen tomar de nuevo medidas drásticas”. De este modo, el alcalde ha asegurado hoy que con el escenario actual podrían celebrarse todas las actividades previstas en la ciudad en Navidad y que tendrán su pistoletazo de salida el día 3 de diciembre, con el encendido del alumbrado que se produce más tarde que en otras muchas ciudades. En todo caso, ha matizado, habrá que ver la evolución “día a día”.

El regidor, que está en contacto permanente con los técnicos de la Consejería de Salud, ha informado de que el foco del centro penitenciario cordobés sigue siendo la principal causa del repunte de casos en la capital y que de momento dicho repunte no ha llevado a un ascenso de las hospitalizaciones en la capital (en la actualidad hay 20 hospitalizados de los que dos están en la UCI).

De este modo, Bellido ha indicado que aunque hay que seguir vigilando la incidencia se debe mantener “la serenidad”. Asimismo, el alcalde confía en que la Consejería de Salud pueda seguir con el ritmo de vacunación, que empieza a poner las vacunas de refuerzo y que se reduzca la cifra de 6.000 cordobeses reticentes a la vacunación

Mesa de veladores

Por último, Bellido se ha referido a la reunión celebrada ayer de la Mesa de Veladores para aplaudir la buena sintonía entre las partes que la componen (vecinos, hosteleros y el propio Ayuntamiento). “Creo, francamente, que Córdoba sigue siendo un ejemplo en la gestión de terrazas”, ha afirmado para referirse a las medidas excepcionales que se tomaron al inicio de la pandemia. La capital cordobesa será, además, una de las primeras ciudades en volver a la normalidad en sus terrazas y para ello el Ayuntamiento está trabajando: “Es razonable que pasada la excepcionalidad volvamos a la normalidad absoluta”, ha concluido Bellido.