Por fin llegó el tan ansiado día para esos 4.560 aspirantes a universitarios que se han enfrentado este martes a la primera jornada de la Selectividad. A las ocho de la mañana los estudiantes llegaban a sus respectivas sedes (34 en el total de la provincia) para realizar la prueba de Lengua Castellana y Literatura que comenzaba con puntualidad a las 8.30 horas y a la que ha seguido la de Historia de España a las 11:00 y la de Lengua Extranjera a las 13:30 horas.

La jornada comenzaba pues con normalidad, sin notificaciones de incidencias desde las sedes y siguiendo el mismo protocolo que el año pasado, “cuidando al máximo todos los detalles del proceso”. Así lo afirmaba este martes desde la Facultad de Medicina y Enfermería el vicerrector de Acceso y Programas de Movilidad de la Universidad de Córdoba, Alfonso Zamorano, quien explicaba que, aunque los protocolos higiénicos sanitarios permitían relajar algunas medidas, no se ha hecho porque “es una garantía para nosotros, los estudiantes y sus familias”.  Por lo tanto se mantiene la distancia de seguridad, fuentes cerradas y gel hidroalcóholico preferentemente aportado por cada alumno. Son veinticuatro institutos los que acogen las distintas sedes de la PEvAU  y con los que se han mantenido reuniones previas para organizarlo todo. “Este año llevan el aprendizaje del pasado curso” aseguraba Zamorano quien, a modo de anécdota comentaba que “todo está yendo con normalidad, ayer vino algún despistado a realizar la prueba pero se tuvo que ir porque era hoy, en fin, lo normal”.  

Una profesora en una de las sedes de la PEvAU esta mañana Manuel Murillo

Por su parte la delegada de Educación, Inmaculada Troncoso, recordaba que ésta es la segunda PEvAU desde que se inició la crisis sanitaria, lo que implica un recorrido ya andado que  “ha hecho relativamente más fácil el camino, puesto que gestionar toda esta logística es ya de por sí complicado, pero mucho más sencillo que el curso anterior que fue la gran prueba de fuego desde que se comenzó con la pandemia”. Respecto a las medidas higiénico-sanitarias la delegada ha destacado que además de mantenerlas, “los alumnos las han interiorizado muy bien porque han tenido todo un curso para hacerlo”. Si algo bueno se puede sacar de todo esto es que “hemos aprendido a ser muchos más sistemáticos con determinados comportamientos”. 

El día 24 de junio a partir de las 8:00 horas se publicarán las notas en toda Andalucía. Para ello se les han entregado unas etiquetas con unas claves para poder consultar las calificaciones en la web de la UCO. A partir de entonces, se está a la espera de la comunicación por parte de la Junta de Andalucía de las fechas en las que se realizarán la PEvAU de incidencias, es decir, aquella para alumnos que hayan tenido covid o estén en período de aislamiento o cualquier otro tipo de incidente muy justificado. Según Zamorano “normalmente se realiza a la semana siguiente pero teniendo en cuenta el tema de la pandemia se está pensando en que sea quince días después, a lo que seguirá la convocatoria extraoficial de julio”.

Las notas de corte no se sabrán hasta que hayan finalizado todas las pruebas y se conozca la demanda de cada una de las titulaciones y la calificación con la que entran los estudiantes. No obstante, “se espera que sigan siendo las mismas” aseguraba Alfonso Zamorano. Este año, como novedad, la convocatoria extraoficial será en julio de tal manera que “todos los procesos de matriculación estén preparados para cuando todos los estudiantes comiencen el curso en septiembre”. Esta era una de las grandes dificultades a las que se enfrentaba la UCO, “había estudiantes que se incorporaban después de la PEvAU de septiembre y empezaban a asistir a la facultad en octubre, con un mes de clase ya” apunta el vicerrector.

Los exámenes

En la primera prueba, en Literatura ha caído poesía, prosa y teatro. “Ha habido alguna pregunta sobre Pío Baroja, supongo que lo esperable. Este año, al igual que el anterior, los alumnos tienen mucha opcionalidad y eso les permite una elección más fácil” apuntaba el vicerrector. Respecto a la parte de Lengua explicaba que “se han incluido análisis sintácticos con las típicas oraciones relativas que ellos esperan”.

Alba Cordero es de las primeras en salir de la prueba de Lengua y Literatura en una de las sedes de la Facultad de Medicina y Enfermería. Es alumna del IES Séneca y según admite “me ha salido bastante bien porque me ha tocado el tema de Literatura que yo quería”, motivo suficiente para estar contenta si bien, “lo único que no he hecho es la sintaxis porque se me da regular, lo he intentado pero no me ha salido”. En Literatura ha escogido un texto de la escritora Carmen Martín Gaite porque “prefería hacer un texto literario a uno argumentativo, me parecía que podía destacar más, eso además me lo recomendó mi profesora y así lo he hecho”. Alba quiere estudiar Educación Infantil y cree, desde la tranquilidad de haber hecho el primer examen, que el resto “se me dará bien”.

Javier García es también alumno del IES Séneca. Sale tranquilo y explica que aunque la parte de sintaxis era más complicada,  “ha resultado bastante asequible” y más teniendo en cuenta “el tiempo que le he dedicado a esta materia”. Y es que Javier ha dejado un poco más apartada esta asignatura “porque he preferido centrarme en Historia o Inglés, que se me dan mejor, por eso he optado por potenciarlas y tratar de conseguir así mejor nota para poder estudiar un doble grado de Derecho y Administración de Empresas”.

En la Facultad de Ciencias de la Educación, en el primer descanso está Lorena, alumna del IES Santa Victoria y aspirante a entrar en la carrera de Administración y Dirección de Empresas. Con entusiasmo, se muestra convencida del buen resultado de la primera prueba realizada, “eran cosas fáciles pero el tiempo me ha venido corto y no me ha dado tiempo a terminar un ejercicio”. A pesar de este contratiempo admite que “el examen ha sido fácil”. Aunque suele ponerse nerviosa cuando se examina hoy, por el contrario, “he estado tranquila y eso también me ha ayudado bastante” y se muestra optimista ante el esto de pruebas que le quedan por hacer.  

A su lado su compañero de instituto y de vocación universitaria, César Sánchez afirma que “aunque no para un diez, pero la prueba me ha salido bastante bien”. En este caso los nervios que tenía no lo han traicionado y el resultado parece que ha sido positivo. “El primer examen es el peor y a partir de aquí, los demás ya van solos”, aseguraba.

Manuel, igual que el resto, también está en el primer descanso. Según explica, “me esperaba algo más complicado sobre todo por el miedo que nos meten en el centro pero ha estado bien”. A pesar de los nervios iniciales una prueba “asequible” ha hecho que pueda “salvar la situación”. Eso sí, puesto a elegir “espero que en Historia me pongan la Restauración y así sacar nota”, afirma entre risas este aspirante a ingeniero agrónomo.

Qué temas han caído

Este año, al igual que ya ocurrió en el curso pasado debido a la pandemia, desaparecen las dos alternativas que se venían ofreciendo en las ediciones anteriores. La única propuesta para esta convocatoria estará compuesta por un mayor número de preguntas con el fin de integrar los contenidos correspondientes a todos los bloques de cada asignatura y los estudiantes podrán seleccionar qué preguntas responder. Los exámenes de la primera jornada corresponden a la Fase de Acceso, cuya superación es obligatoria para acceder a la universidad. Se compone de tres materias obligatorias: Lengua Castellana y Literatura, una Lengua Extranjera -alemán, francés, inglés, italiano o portugués- e Historia de España. A estas se suman una cuarta disciplina de modalidad a elegir: Fundamentos del Arte, Latín II, Matemáticas II o Matemáticas Aplicadas a la Ciencias Sociales. 

En la prueba de Lengua y Literatura, los alumnos han podido elegir entre dos opciones: un texto de Carmen Martín Gaite titulado ‘El cuarto de atrás’ y el artículo periodístico de Diario de Sevilla firmado por Luis Sánchez-Moliní ‘El Lobo’.

 Además, los estudiantes han tenido que contestar a una de estas cuatro opciones propuestas: La novela desde 1975 hasta nuestros días, El teatro desde 1939 hasta nuestros días, La novela desde 1939 hasta los años 70 y La poesía desde los años 70 hasta nuestros días. Igualmente, debían elegir entre comentar rasgos de la narrativa de Carmen Martín Gaite, de Luis Cernuda (‘La realidad y el deseo’), de Pío Baroja (‘El árbol de la ciencia’) o de Antonio Buero Vallejo (‘Historia de una escalera’).

 En la evaluación de Historia de España, los participantes han tenido que desarrollar uno de los siguientes temas. En primer lugar, Revolución liberal en el reinado de Isabel II. Carlismo y Guerra Civil. Construcción y evolución del Estado liberal; en segundo lugar, Guerra colonial y crisis de 1898; en tercero, la Dictadura de Primo de Rivera, y por último, El proceso de transición a la democracia y la Constitución de 1978.

 Este examen incluye también la respuesta a tres de seis cuestiones, que abordan la asociación que aglutinó a los ganaderos en la Edad Media, la figura política que se hizo cargo de las tareas de gobierno en lugar del rey durante el siglo XVII o el nombre que reciben los decretos que abolieron los fueros de los territorios de la antigua Corona de Aragón. También han preguntado por los españoles que se mostraron favorables al gobierno de José I, por el pacto que reconocía la alternancia entre liberales y conservadores para gobernar durante la Restauración o el monarca que reinó durante la etapa histórica que transcurre entre 1923 y 1930. 

La Fase de Acceso se completa con la Fase de Admisión, que es voluntaria para subir nota. El estudiantado se puede examinar de hasta cuatro disciplinas, aunque únicamente se computará la nota de dos de ellas. Son elegibles cualquiera de las 24 materias que componen la PEvAU, a excepción de Lengua Castellana y Literatura e Historia de España.

También se puede subir nota examinándose de un segundo idioma distinto del de la Fase de Acceso o utilizando la puntuación obtenida en la asignatura de modalidad de dicha fase si tiene cinco o más puntos. Cada materia pondera entre 0,1 y 0,2 según el grado en el que se solicite la admisión. La nota máxima a alcanzar en esta fase es de cuatro puntos. Con la nota obtenida, los estudiantes podrán solicitar cualquiera de las plazas de grado que se ofertarán en el Distrito Único Andaluz para el próximo curso.