La congregación provincial de las Madres Escolapias anunció ayer su decisión de abandonar el colegio San Rafael, centro cuya gestión y dirección han asumido durante los últimos 90 años, tras la decisión del obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, de integrarlo en la Fundación Diocesana Santos Mártires, creada por el obispado y que hasta el momento ha absorbido tres colegios de la Obra Pía, Jesús Nazareno de Córdoba y Aguilar y la Milagrosa de Bujalance.

La decisión del obispo de relevar a las Madres Escolapias en las tareas de dirección del centro, que seguirá siendo concertado, ha caído como un jarro de agua fría entre los padres y antiguos alumnos, que critican "el ocultismo" con el que se ha realizado la operación y critican que "los padres no hayan sido informados antes de que concluyera el plazo de inscripción para ejercer su libre elección de centro y decidir sobre el futuro de sus hijos". Además de defender la labor realizada por la congregación durante casi un siglo, el AMPA teme que el cambio de dirección afecte al ideario y al espíritu del centro, "que han imprimido desde su origen las propias Madres Escolapias". En la misma línea, se manifestaban por escrito las afectadas, que "ante la falta de vocaciones y el deseo de compartir con seglares la misión educadora de nuestro carisma", plantearon al obispo un convenio para que la Fundación Escolapias Montal se hiciera con la dirección y administración, algo a lo que el obispo de Córdoba se niega. El AMPA del colegio San Rafael informará hoy al resto de padres sobre el encuentro con el obispo en una reunión que se celebrará a las 20.00 horas.