El Córdoba CF se queda con menos polivalencia

La lesión de Adri Castellano, este miércoles durante el entrenamiento del Córdoba CF, añade un problema a las posibilidades de cambio que pueda estar barruntando Iván Ania para el encuentro del próximo sábado, en El Arcángel, ante el Linares Deportivo (21.30 horas, FEFTV).

Una defensa sin polivalencia

El central y lateral zurdo cordobés actúa como verdadera clave de bóveda en la organización de la tan traída y llevada polivalencia del plantel cordobesista, el pasado verano, durante la actuación del Córdoba CF en el mercado de fichajes. Juan Gutiérrez Juanito, además de Antonio Fernández Monterrubio, reiteraron el mensaje de que el deseo en la cúpula era la constitución de un plantel corto pero con diversas polivalencias en el mismo con el fin de que el dinero destinado a la plantilla pudiera alcanzar cantidades más altas de forma individual. Mismo dinero que la pasada campaña pero entre menos jugadores suponía una ficha media más alta. Al menos, en teoría.

El caso es que Adri Castellano se lesionó en el cuádriceps (el parte médico confirmó una lesión en el miotendinoso del rector anterior de su muslo derecho) y el cordobés estará varias semanas en el dique seco, lo que coincide con las primeras dudas en el seno de la entidad blanquiverde, no sólo con la defensa, sino con el entramado defensivo del equipo. Pero iniciando los posibles cambios con los que podía especular el técnico asturiano, éstos se iniciaban en el centro de la zaga, precisamente, con Adri Castellano. El cordobés podía tomar la titularidad en el eje de la zaga y Ania podía pensar en dos centrales zurdos, haciendo pareja en este caso con Gudelj, o sentar al serbio y mantener como pareja a Adrián Lapeña. Por otro lado, su hipotética titularidad también podía estar dirigida al lateral izquierdo, su posición natural. En esta segunda opción, obligaría a Iván Ania a elegir entre tres teóricos extremos izquierdos: los dos conocidos, Simo y Adilson Mendes, y el propio Calderón. La caída de Adri Castellano de la lista de convocados hasta el mes de octubre deja mermada la consabida polivalencia, ya que el defensa cordobés era el que más opciones daba a Iván Ania de entre todos los integrantes del plantel cordobesista.

Otra opción en la defensa que puede estar valorando el preparador cordobesista ante la fragilidad defensiva que ha mostrado el equipo es el de dar un respiro a Adrián Lapeña y entregarle la titularidad el sábado, ante el Linares Deportivo, a Carlos García. Han surgido no pocas voces críticas con el equipo que señalan directamente al eje de la zaga y su blandura en este inicio de campeonato. Una falta de contundencia especialmente grave en las acciones a balón parado, algo que ya se vio en el inicio liguero ante el Ibiza y que se reprodujo de forma alarmante en San Fernando, cuyos dos goles primeros fueron anotados de sendas faltas laterales y aprovechando la falta de contundencia cordobesista.

No tiene mucha más polivalencia en el plantel, ahora mismo, Iván Ania, por más que disponga de nombres. Iván Hernández no deja de ser una alternativa a Carlos Albarrán que no se ha mostrado como de los peores de entre la zaga blanquiverde, por lo que más allá de los hombres de la primera plantilla el asturiano tendría que tirar del filial.

Centro del campo

En el centro del campo, Recio volvió a entrenar apartado del grupo este miércoles y aún le queda para poder disfrutar de minutos competitivos de calidad y que puedan ser aprovechados por el equipo. Su inclusión en una lista con todas las garantías, así como con Isma Ruiz, favorecería las opciones en el centro del campo, incluida la de conformar una línea de tres en la medular, algo a lo que parece apuntar el equipo en un futuro no muy lejano. Entre el malagueño, Álex Sala, Isma Ruiz, Diarra, así como Cristian Delgado y la opción de “descolgar” unos metros a Kike Márquez –tal y como hizo en Murcia- no es ni mucho menos descabellado pensar en un mediocampo del Córdoba CF con tres integrantes en no muchas semanas, todas las que necesite Recio para estar en una convocatoria como uno más.

En las bandas y delantera esa aparente polivalencia se va reduciendo. Simo y Adilson pelearán por un puesto y Carracedo ha quedado como el único extremo derecho auténtico en el plantel, ya que Kuki Zalazar es un mediapunta puro que, si actúa en la derecha lo hará por obligación y siempre con la idea de meterse hacia dentro. Y en punta, Casas o Toril. No hay más. Quizá la primera tarea para el mercado de enero sea buscar a un hombre que pueda competirles el puesto y, además, caer a banda. En otras palabras: otro Adrián Fuentes y, si puede ser, con mayor nivel.

Mientras tanto, Iván Ania tendrá que buscar alternativas al primer problema que le ha surgido en Liga: siete goles en tres partidos es una tarjeta de presentación inasumible no ya sólo para el objetivo del equipo, que es entrar en play off como mínimo, sino para mantener la categoría. Y sólo tiene dos caminos para enmendarla: o probar con el cambio de fichas (nombres) y de la polivalencia –limitada ahora por la lesión de Castellano- del plantel o convencer a sus hombres de que el trabajo sin balón, el entramado defensivo del equipo es el único camino viable hacia el objetivo.

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