El Córdoba CF trabajó este lunes, en la Ciudad Deportiva, después de superar el difícil compromiso contra el CD Mensajero. La plantilla de Germán Crespo dedicó la mañana al apartado de recuperación mientras que el martes vivirán su jornada de descanso. Así pues, a partir del miércoles, toda la fuerza del grupo se centrará en sumar los tres puntos contra el Antequera CF, una circunstancia que mantendría -como mínimo- la renta de 6 de ventaja que poseen con respecto al CP Cacereño.

En total serán cuatro las sesiones de entrenamiento que tendrá por delante, ya que el choque liguero dentro del grupo 4 de la Segunda RFEF se producirá el próximo domingo (El Maulí, 17.00 horas). No estarán solos en el feudo malagueño, lo que quedó refrendado desde las primeras horas del día en las taquillas del estadio. Allí, los abonados cordobesistas acudieron para sacar su entrada -y posibilidad de reserva en el autobús que fletará el club-. Hasta 300 localidades envió el Antequera de cara a un desplazamiento cercano y que muchos esperaban. Por 10 euros esperan vivir un sensacional ambiente, tanto en las gradas como en la previa que prepara la Peña Boquerones Blanquiverdes, y disfrutar de un nuevo triunfo de su equipo.

La retaguardia, mermada para el partido

La defensa focalizará la atención del técnico nazarí. La sanción a Dragisa Gudelj después de ver su quinta amarilla -cuatro con el Cádiz B y una con el Córdoba- deja en una delicada situación a dicha línea del campo. Las lesiones de José Alonso -rotura del aductor- y Bernardo Cruz -fuerte golpe en el tobillo- plantean un escenario donde únicamente estarán de centrales José Cruz y Ricardo Visus. Así pues, no sería de extrañar que los jugadores del filial Valtteri, Mosquera, Iván Martínez o Tala pudieran actuar con el primer equipo para ayudar en la preparación.

El lateral José Ruiz, el medio Toni Arranz y el extremo Luismi Redondo se mantienen a una cartulina de la suspensión, otro escenario a contemplar para el futuro y que podría provocar algunas rotaciones dentro del once.