El Córdoba CF inició este lunes su segunda semana de entrenamientos, ocho días después de que la Liga 20-21 terminara para el conjunto blanquiverde con el traumático descenso a Segunda RFEF y sobre la que ya tiene una idea de cuáles serán sus rivales o la mayoría de ellos.

A las 10.15 estaban todos los componentes del plantel blanquiverde sobre el campo uno de la Ciudad Deportiva, único prácticable ahora mismo. Hace unos diez días se comenzó a migrar la variedad en el campo pequeño de Camino de Carbonell y hoy mismo se ha iniciado en El Arcángel. Ese único campo utilizable tendrá que estarlo, al menos, una semana más, ya que las previsiones en la entidad cordobesista es que la primera plantilla continúe entrenando esta semana, al menos hasta el jueves, y la próxima semana también.

Todos los jugadores se pusieron a las órdenes de Germán Crespo, salvo Samu Delgado. El manchego continúa recuperándose de su última lesión y, probablemente, la próxima semana podría estar ejercitándose sin problemas. También estuvieron en el grupo, aunque hicieron parte del trabajo aparte, junto a Víctor Salas, Luismi Redondo y Carlos Puga. Los dos jugadores del filial estuvieron en la goleada del domingo a Los Barrios. El extremeño, en concreto, anotó un triplete y el lateral jugó los 90 minutos, por lo que no realizaron todo el entrenamiento con los mayores. Sí estuvo Álex Robles, aparentemente sin problemas en una sesión lógicamente suave que se centró en partidillos en la mitad de campo y con el consiguiente «castigo» final para el equipo perdedor.

Javi Flores charla con Germán Crespo durante un instante del entrenamiento del Córdoba CF, este lunes, en la Ciudad Deportiva. FRANCISCO GONZÁLEZ

Otra nota reseñable de la mañana la protagonizó Juan Gutiérrez Juanito. El aún director deportivo apareció por la Ciudad Deportiva cuando la sesión llevaba iniciada unos 15 minutos. Conducía un coche del club e iba acompañado en él por David Ortega, Rafa Herrerías y Raúl Cámara. Los cuatro estuvieron durante el esto del entreno y durante un rato se les vio departir con los servicios médicos e incluso con el entrenador.