MEDIO AMBIENTE

La Laguna Jarata, en Montilla, vuelve a la vida

Las últimas lluvias que se vienen registrando desde el paso de la borrasca Karlotta han permitido recuperar el aspecto del enclave

La Junta ha destinado casi 270.000 euros a un proyecto de restauración hidrológica

El último aporte de agua relevante tuvo lugar el pasado 15 de febrero, cuando se anegaron varias vías

Vista aérea del aspecto que presenta en la actualidad la Laguna Jarata tras las intensas lluvias registradas en las últimas semanas.

Vista aérea del aspecto que presenta en la actualidad la Laguna Jarata tras las intensas lluvias registradas en las últimas semanas. / JOSÉ ANTONIO AGUILAR

Juan Pablo Bellido

Juan Pablo Bellido

Las últimas lluvias que se vienen registrando en Montilla desde el paso de la borrasca Karlotta a primeros de febrero han permitido que la Laguna Jarata recupere todo su esplendor, tras el proyecto de restauración hidrológica y ambiental que ha acometido la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul de la Junta.

«Las recientes lluvias han puesto de manifiesto el buen funcionamiento de las actuaciones de restauración de la Laguna Jarata e, incluso, hemos tenido la visita de una pareja de ánades reales», destacó la teniente de alcalde de Infraestructuras y Medio Ambiente del Ayuntamiento de Montilla, Raquel Casado.

El proyecto de rehabilitación hidrológica y ambiental de la Laguna Jarata ha consistido en la retirada de sedimentos, la restauración de la cubeta de inundación para albergar hasta 29.146 metros cúbicos de agua y la reforestación perimetral de la laguna con 1.766 ejemplares de 15 especies vegetales. 

Inversión de 270.000 euros

Las obras, que han contado con una inversión próxima a los 270.000 euros, cofinanciados por el Fondo Europeo Agrario de Desarrollo Rural (Feader), han incluido la dotación de señales interpretativas, así como la construcción de una zona de recepción, un sendero y un observatorio de aves.

Con una extensión total de unas 13,4 hectáreas, el terreno sobre el que se asienta la laguna está formado por materiales impermeables pertenecientes al Triásico, muy similares a los de las diferentes lagunas del Sur de la provincia de Córdoba.

La laguna se extiende a lo largo de unas 13,4 hectáreas.

La laguna se extiende a lo largo de unas 13,4 hectáreas. / JOSÉ ANTONIO AGUILAR

La presencia de sal en el suelo y su tendencia a encharcarse en época de lluvias favorecen la proliferación de tarajes, un arbusto perteneciente a la familia Tamaricaceae que se encuentra en el Mediterráneo occidental, aunque también son frecuentes los carrizos. No obstante, la especie más extendida es de carácter nitrófilo y halófilo. 

Esta vegetación era utilizada por diferentes aves para anidar, entre las que destacaban cigüeñas, ánades, avefrías, fochas, pollas de agua y limícolas o zancudas. También eran frecuentes los anfibios como sapos y ranas.

Referencias históricas

Las primeras referencias históricas documentadas sobre la Laguna Jarata se remontan a 1528, tal y como constan en las Actas Capitulares del Ayuntamiento de Montilla, que aluden a la costumbre de repartir entre los dueños de ganado lanar los aguaderos del término municipal para que en ellos pudieran abrevarse los rebaños.

Varios documentos que se conservan en el Archivo Histórico Local también constatan que en la segunda mitad del siglo XX el paraje de Jarata se transformaba en una laguna, fundamentalmente durante los inviernos más lluviosos. Sin embargo, las captaciones de agua para las labores agrícolas provocaron la paulatina desecación de la zona.

Con todo, en el año 1996, uno de los más lluviosos del último siglo, el paraje de Jarata se volvió a encharcar, lo que llevó al Ayuntamiento de Montilla a plantearse la posibilidad de recuperar la laguna. Por ello, en mayo de 1997, el Consistorio solicitó una subvención para actividades de voluntariado ambiental, consistentes en la plantación de vegetación hidrófila en su entorno.

Observatorio de aves y nueva señalética en el lugar.

Observatorio de aves y nueva señalética en el lugar. / JOSÉ ANTONIO AGUILAR

El pasado 15 de febrero, la Laguna Jarata registró un importante aporte de agua, gracias a una tormenta que provocó importantes balsas de agua en varios puntos del casco urbano y, una vez más, obligaron a cerrar al tráfico la carretera CO-4207 que conecta Montilla con Montalbán.

Según los datos recopilados por Meteoclimatic, la tromba de agua llegó a descargar más de 12 litros por metro cuadrado en apenas 15 minutos, lo que provocó importantes balsas de agua en la avenida del Marqués de la Vega de Armijo, donde la calzada y los acerados se vieron inundados rápidamente. Otro de los puntos donde se acumuló gran cantidad de lluvia fue en la avenida de Granada, donde llegó a colapsar una alcantarilla, así como la calle Conde de la Cortina, entre las Bodegas Pérez Barquero y el IES Inca Garcilaso. 

Suscríbete para seguir leyendo