Tres enfermedades que se combaten tomando semillas de lino

Estas son las tres patologías que se pueden mejorar si consumimos linaza o semillas de lino

Tres enfermedades que se combaten tomando linaza

Tres enfermedades que se combaten tomando linaza

El tren de vida que sostenemos en la actualidad, con el ritmo extremadamente acelerado y unos hábitos alimenticios más que cuestionables nos exige buscar alternativas saludables con las que podamos equilibrarnos y buscar y el bienestar.

Además de los productos de temporada y los ingredientes que todos sabemos identificar como buenos y saludables hay todo un catálogo de especias por descubrir que pueden ayudarnos a mantener una dieta saludable.

La linaza o las semillas de lino son uno de estos superalimentos que, sin ser tan comunes, están llenos de propiedades extraordinarias que pueden ser excelentes para combatir algunas enfermedades pero sobre todo para promover el bienestar general.

El consumo de linaza o semillas de linaza puede ayudar a combatir desde los problemas cardiovasculares hasta los trastornos neurológicos, ofreciendo una gama muy amplia de beneficios terapéuticos.

Protección para el corazón

Entre las mejores características que podemos encontrar en la linaza está su capacidad para proteger el corazón y el sistema cardiovascular. Gracias a que son una de las mayores fuentes vegetales de ácidos grasos omega-3 esenciales, las semillas de lino ayudan a mantener tanto la salud de los vasos sanguíneos como a reducir el colesterol en la sangre.

Los estudios científicos que han estudiado su impacto demuestran que consumir regularmente linaza puede ser una garantía de cara a la prevención de enfermedades cardiacas como la arterioesclerosis, los infartos cardiacos o los trastornos circulatorios.

Antiinflamatorio

La linaza tiene una interesante apacidad antiinflamatoria que la convierte en una buena aliada para luchar contra las enfermedades derivadas de esta, como la artritis o la psoriasis. Las semillas de lino cuentan con los lignanos que tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayudan a reducir la inflamación del cuerpo y a aliviar los síntomas asociados.

Equilibrio hormonal y prevención del cáncer

El consumo de linaza también puede tener un importante papel en la prevención del cáncer ya que los lignanos presentes en las semillas de lino se convierten en compuestos que ayudan a regular el equilibrio hormonal, pero que también pueden reducir el riesgo de cáncer de mama y de próstata. Por otro lado, los antioxidantes presentes en la linaza también pueden ayudar a proteger al cuerpo contra los daños causados por radicales libres, de forma que se reduce el riesgo de desarrollar cáncer y otras enfermedades relacionadas con el estrés oxidativo.