El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha marcado distancias hoy entre España y Grecia porque la situación de la economía española "no es en absoluto equiparable" a la griega gracias a las reformas llevadas a cabo en los últimos años por el Gobierno de Mariano Rajoy.

Una muestra de ello es que España crece en estos momentos a un ritmo anualizado del 4 % y la creación de empleo es "muy intensa", algo que confirmará los datos de la epa de este mes, según ha destacado De Guindos en rueda de prensa.

Los desequilibrios de la economía española se han corregido, los bancos se perciben como solventes y el país ha reducido de forma importante su endeudamiento, que es compatible con el flujo de nuevo crédito, al tiempo que la ratio de deuda pública empezará a bajar el año que viene y en el mercado inmobiliario hay señales de que el ajuste ha cesado, ha resumido De Guindos.

Sin embargo, en el caso de Grecia la situación es totalmente diferente porque su economía ahora es incapaz de avanzar y por eso lo "más relevante" es que el Gobierno heleno implemente las reformas que permitan a la economía crecer sin pensar en reestructuraciones de deuda y condiciones de servicio de la deuda.

Y es que ha sido el deterioro de la situación económica de Grecia lo que hace que la deuda del país no sea sostenible, algo que no es incompatible con que Grecia siga en el euro.

La moneda común es un elemento de protección para que no se vuelvan a producir los errores del pasado, ha considerado De Guindos, y el euro sigue siendo el marco y moneda que más garantiza la mejora de la prosperidad de Grecia.

En cuanto a la dimisión del ministro de Finanzas griego, Yanis Varufakis, De Guindos ha dicho que nada tiene que decir al respecto, pero ha señalado que entre ellos ha habido una buena relación y se ha mostrado convencido de que la tendrá con su sucesor.