El Córdoba B ofreció su peor imagen en la vuelta a El Fontanar, donde ha caído en la matinal del domingo 0-2 ante el Villanovense, un recién ascendido mejor posicionado en la tabla y que desde el primer momento hizo más que el conjunto local por llevarse los tres puntos. Una derrota que devuelve al filial a la lucha por la salvación y hace que se olvide, por el momento, de la lucha por la promoción. Mucho trabajo por hacer y hay que asomarse al escaparate del mercado de invierno.

El césped de El Fontanar presentaba un aspecto totalmente distinto de las últimas comparecencias del filial en el estadio municipal, muy mejorado y lejos de las importantes deficiencias con las que empezó la temporada. Se le notaba el trabajo de recuperación en estas jornadas jugando fuera de casa y en El Arcángel. Y el palco, vacío.

La vuelta al once de César Morgado permitía a Romero devolver a Uxío al centro del campo. La otra novedad fue la presencia de Sebas Moyano en banda izquierda, segunda titularidad del de Villanueva en lo que va de temporada, para tapar la ausencia de Dani Hernández con Josefran por la derecha.

Los primeros diez minutos fueron de tanteo, aunque con algo más de posesión de los extremeños, pero sin llegadas, ni ocasiones, ni tan siquiera disparos. Una entrada de Anxo por la izquierda tras una pérdida de posición de Cristian habilitó al jugador para llegar casi hasta la línea de cal y colgarla al área, donde Salvi remató para estrellar el balón al travesaño en la primera clara, y para los visitantes.

Hubo una doble intervención de Villanueva en el 14 ante el disparo de Salvi y después del exjugador del filial blanquiverde Carlos Fernández, pero el vasco salvó. Los rojillos se mostraban mucho más serios y ambiciosos que los cordobesistas. Se cantó el uy en la grada en el 25, tras un buen centro de Cristian desde la derecha que llegó a rematar Jonathan para obligar al meta visitante a lucirse. La primera buena para los canteranos en un partido que fue perdiendo intensidad y atractivo con el paso del tiempo.

Al filo del descanso, César tuvo un error garrafal en la cesión a Jon que a punto estuvo de costar el gol, pero el meta vasco volvió a estar acertado en el uno contra uno ante Carlos Fernández. Primera parte, regular para los locales sin que le llegase ni un balón en condiciones al punta cordobesista.

Con algo más de ritmillo empezó la segunda parte y José Fran tuvo la primera nada más reanudarse el encuentro, pero a las manos de José Fuentes. Un espejismo. Seguía el suplicio. Aburrimiento y mucho frío.

Trinidad dio el susto, de nuevo, al disparar desde fuera del área a la escuadra derecha de Villanueva, que obligó al cancerbero a estirarse para evitar el tanto. Pero era cuestión de tiempo. Cabezazo bajo que paró a mano cambiada Jon, tardó la zaga en sacar el balón y Pajuelo la metió al fondo de las mallas (64’). Y lo peor estaba por llegar por un par de minutos después Owona remató el segundo.

Romero movió el banquillo buscando enmendar la situación, sacando a un perdido Sebas Moyano por David Álvarez y quitando a César, un central, por Alberto Quiles, un delantero centro. Pero el Villanovense era ya el dueño del encuentro y Carlos se hacía con todos los balones, llegando a todo y advirtiendo del tercero, que no llegó.

Mala imagen, mal partido y mucho por mejorar. La semana que viene toca visitar el Ramón de Carranza, difícil plaza para reconducir la situación.