Humor, ternura, música, una fantástica técnica en la manipulación de objetos y una magia muy original e impactante que comunica a través del absurdo es lo que propone Antonio Díaz, más conocido como el Mago Pop, que recalará en el Gran Teatro de Córdoba del 13 al 15 de mayo con su espectáculo La gran ilusión , del que ofrecerá cinco funciones. La puesta en escena incluye una gran pantalla y medios audiovisuales que aseguran la perfecta visibilidad del montaje en todo el recinto. Después de haber sido aplaudido por 450.000 espectadores, esta producción es un espectáculo inspirado en la película El show de Truman , que protagonizó Jim Carrey en 1998. En este caso, una cadena de televisión produce el segundo reality show total de la historia: MagicLife .

El protagonista es el centro involuntario de un programa de televisión que retransmite su vida 24 horas al día. Sus familiares y amigos son actores de prestigio que interpretan un papel en su vida. Desde su infancia, el protagonista siente una gran obsesión por los juegos de manos y todo el mundo le hace creer que es un ilusionista excepcional. Pero la realidad es bien distinta. Un día, por un error de producción, el protagonista descubre la verdad y decide abandonar el programa. Será entonces, fuera del show, donde el personaje se marque un objetivo: hacer un espectáculo para demostrar a todo el mundo que es un gran ilusionista.

"La idea se me ocurrió cuando tenía 14 años y vi por primera vez El show de Truman . Me impresionó mucho. La magia se basa en la ilusión, y la idea de que alguien capaz de ilusionar a los demás viviese también ilusionado por el resto sin saberlo me parecía un buen punto de partida. No lo había hecho antes porque pensaba que si el espectáculo se iba a llamar La gran ilusión , debería ser una producción de mayor formato. Ahora lo hemos intentado y estamos muy contentos con el resultado", explica Antonio Díaz.

Entre los números más espectaculares, hay un homenaje a otra película que marcó la infancia del protagonista: Regreso al futuro . "En la función hacemos un viaje en el tiempo en directo demostrando de manera convincente que ocurre de verdad. Aunque todos sepamos que es imposible, la ilusión nos deja sin argumentos", apunta el popular ilusionista.