El Centro de Flamenco Fosforito inauguró ayer un nuevo espacio expositivo dedicado a la historia de la guitarra flamenca. El acto ha contado con la presencia del alcalde, José Antonio Nieto, que reiteró en su visita el compromiso municipal para "seguir protegiendo y difundiendo el flamenco y la guitarra flamenca a través de este centro". Las nuevas dependencias vienen a complementar el itinerario expositivo del museo ubicado en la antigua Posada del Potro, un espacio "vivo y universal que ha acogido más de doscientas actividades desde su apertura", recordó Nieto, en el que, además de gran parte del legado cedido por el cantaor Antonio Fernández Díaz Fosforito a la ciudad de Córdoba, se ofrece al visitante un recorrido interactivo por los hitos y figuras históricas más destacadas del arte jondo, los distintos palos del árbol flamenco y la historia del Concurso Nacional de Arte Flamenco de Córdoba.

A través de una serie de paneles informativos, la nueva sala detalla la evolución histórica de este instrumento partiendo de sus antecedentes musicales en la época del músico árabe Ziryab hasta llegar a la guitarra contemporánea de Vicente Amigo.

Precisamente, el guitarrista cordobés ha sido uno de los artistas que ha donado una de las cuatro guitarras que se exponen en las nuevas dependencias del Centro de Flamenco Fosforito, una colección en la que también se incluye una guitarra del cordobés José Antonio Rodríguez, otra cedida en la última edición del Festival de la Guitarra de Córdoba por la cervecera Cruzcampo y una guitarra romántica del siglo XIX. La Sala de la Guitarra pretende de esta forma resaltar el papel protagonista que Córdoba sigue desempeñando en la historia de este instrumento. Bajo esta premisa la nueva sala también rinde homenaje al minucioso trabajo artesanal que realizan los luthiers de guitarras flamencas, un arte en el que Córdoba ha contado con una larga lista de artesanos de prestigio.