El "guiño" que los autores del proyecto hacen a la historia de Córdoba, a sus raíces árabes, está en las celosías de la fachada de la avenida de América. En palabras de Cuellas, el "edificio tendrá dos pieles" y la celosía de acero inoxidable proporcionará una visión interna, "como si tuviera un velo", que "le confiere un atractivo que lo diferencia del resto". Por la noche, la fachada iluminada será "espectacular". Además, el zócalo de cristal, "cuando esté iluminado, hará que el edificio parezca que está levitando". Por dentro, su estructura será "ordenada".

La biblioteca tendrá área infantil a ras del jardín, que se abrirá a un patio propio, que será prolongación de los espacios de lectura y juegos hacia el exterior y estará considerado como una sala más. También habrá una zona de depósito de libros. En la planta baja estarán las salas de usos múltiples, lectura y estudio. El piso primero se configura como un espacio diáfano en el que el mobiliario organiza las áreas. Ahí irá la sala de fondo general. En la segunda se ubicarán el área de consulta y lectura y el fondo especializado.