Los depósitos de Lucena siguen estables tras el fin de los cortes de agua

La paralización, aún provisional, de las restricciones nocturnas de agua en Lucena continúa sin alteraciones reseñables en los depósitos municipales. El nivel de los almacenamientos persiste en unos seis metros –sobre un total de ocho-- desde que, el pasado 1 de mayo, el equipo de gobierno decidiera acabar con los cortes nocturnos ante la positiva evolución del manantial de Zambra y del embalse de Iznájar. 

Por encima de la aplicación de medidas de ahorro, el Ayuntamiento señala como factor principal, al garantizar un suministro ordinario, la cantidad de agua recibida desde Zambra, la principal vía de abastecimiento.

Concluyen las limitaciones de agua nocturnas en Lucena después de diez meses

Actualmente, tras las lluvias descargadas desde Semana Santa, Lucena percibe desde la pedanía ruteña unos 2.400 metros cúbicos cada jornada. Este ritmo constante ha permitido que, al suspender las limitaciones a los domicilios, únicamente, y como se preveía, haya debido aumentar "en una hora u hora y media", apuntó la consejera delegada de Aguas de Lucena, María de la O Redondo, el tiempo de bombeo requerido a Emproacsa. En estos momentos, Lucena absorbe 11 horas diarias de recepción de recursos hídricos desde Iznájar.

Al respecto del contexto vaticinado ante el próximo verano, Redondo insistió en condicionar el futuro de las restricciones a "la entrada de agua que haya desde Zambra". En consecuencia, "si sigue sin llover", advirtió, Lucena regresaría a un escenario complejo con la necesidad imperiosa de precisar de "hasta 20 horas" desde Emproacsa para alcanzar los 9.000 metros cúbicos de agua diarios vinculados al consumo medio. 

La progresión favorable del panorama hídrico, además, se sustenta en la detección de "algunos fraudes" y en la resolución de "averías importantes". La subsanación de estas incidencias ha elevado el flujo de agua hasta en 900 metros cúbicos.

Redondo pospuso a la próxima semana el consejo de administración anunciado, desde antes de las Fiestas Aracelitanas, para ratificar el fin de los cortes y decidir sobre el llenado de las piscinas.