Vídeo AP-LaPresse/Agencia Atlas - Recibido entre vítores y aplausos como si fuese una superestrella, Putin entraba pisando fuerte en el estadio donde, según los medios rusos, se han juntado unas 200.000 personas. A pocas horas del día del defensor de la patria ha pronunciado un discurso muy patriótico. Las palabras más repetidas: Rusia y Hurra, por supuesto, la melodía que las acompañaba no podía ser otra que el himno. Putin también ha querido elogiar a sus tropas describiéndolas como "heroicas", como la mejor defensa de lo que para él es lo más sagrado: “la familia y la patria”. El concierto se produce justo después de la suspensión por parte de Moscú de su participación en el último tratado de control de armas nucleares con Estados Unidos. Un gesto de confrontación más que se suma a una larga lista de desplantes que han llevado a las relaciones entre Rusia y Occidente a estar en su punto más bajo desde la Guerra Fría.
