Si hablamos de la piña, de ese fruto marrón que nace en un árbol centenario y que esconde un secreto dentro, muchos se acordarán de momentos de su infancia. Pero mucho ha cambiado desde entonces, en los últimos 10 años su producción ha caído en picado. En Castilla y León han pasado de tener 50 productores a tan sólo 16. El motivo; la sequía, los cambios medioabientales y sobre todo, las plagas.