Tragedia en Murcia
Las discotecas incendiadas Teatre y Fonda Milagros llevaban abriendo sin licencia desde marzo de 2022
El teniente de alcalde de Planificación Urbanística, Antonio Navarro, afirma que el Ayuntamiento se personará en como acusación particular en la causa contra el local Teatre por haber continuado abierto sin autorización
Nunca hubo permiso para que Teatre dividiera su local en dos, como hizo
Jaime Ferrán
Las discotecas Teatre y Fonda Milagros incendiadas en la madrugada de este domingo en Murcia, en las que murieron al menos trece personas, no tenían licencia municipal y sobre ellas había una orden de cese de actividad desde enero de 2022.
Así lo han comunicado el concejal socialista Andrés Guerrero, que ocupó la concejalía de urbanismo la pasada legislatura, y que ha informado en rueda de prensa sobre este punto junto al actual teniente de alcalde de Planificación Urbanística, Huerta y Medio Ambiente, Antonio Navarro, del PP.
Según han explicado los concejales de ambos partidos, Teatre S.L, con licencia de apertura desde 2008, comunicó en 2019 su intención de dividir el local en dos. Sin embargo, el Ayuntamiento no le concedió la autorización y en enero de 2022 ditaminó una orden de cese por entender que Teatre debía presentar una nueva licencia.
La discoteca presentó un recurso ante esta decisión que fue desestimado en marzo de 2022. Ya en octubre del año pasado, el Gobierno local de entonces, del PSOE, requirió al servicio de Inspección que ejectuara el cese. A partir de ahí es donde, según Navarro, se deben depurar responsabilidades, ya que, evidentemente, el cese no se produjo y ambas discotecas han continuado abiertas de forma ilegal desde entonces.
Para el Ayuntamiento, "la única responsable" de la tragedia es la discoteca Teatre por haber hecho "caso omiso" de la orden de cese de actividad
Para ambos ediles, del PP y del PSOE, "la única responsable" de la tragedia de este domingo es la empresa por haber hecho "caso omiso" de las comunicaciones del Ayuntamiento. Navarro ha asegurado, tal y como indicó ayer el alcalde de Murcia, José Ballesta, que desde el Consistorio acturán "contundentemente" para "depurar responsabilidades".
En este sentido, además, ha adelantado que la Corporación murciana se va personar como acusación particular en la causa contra Teatre "por haber incumplido" el cese. "Hasta las últimas consecuencias, cueste lo que cueste", ha subrayado el edil.
Preguntas sin responder
Sin embargo, ninguno de los dos responsables de Urbanismo en Murcia durante los últimos años ha sabido responder a por qué la discoteca Teatre ha estado abierta durante un año desde que se diera orden a Inspección de que ejectuara el cese o, incluso, desde que se desestimara el recurso contra el cese de la actividad, en marzo del año pasado.
Fonda Milagros, local en el que murieron trece personas, "no existía administrativamente" y, por tanto, escapaba del control municipal, reconocen los ediles de Urbanismo
Tampoco sabía el Ayuntamiento, a juzgar por las declaraciones de Navarro y Guerrero, de la existencia de Fonda Milagros, el local en donde parece que se originó el incendio que acabó con la vida de trece personas y donde se celebraban fiestas continuamente. "Administrativamente no existía", remarcaron.
Lo único que ha podido asegurar Navarro es que, desde que se diera orden de ejecutar el cese a Inspección (servicio municipal), no había habido ninguna denuncia ni habían tenido constancia de altercado alguno en la zona. Es decir, daban a Teatre por cerrado y nadie ejercía ningún control sobre el lugar.
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