Ya estamos en pleno verano y los runners no paran su actividad. A pesar de las altas temperaturas, es también un buen momento para emprender una rutina saludable e incorporar el running a tus hábitos. Con todo, es preciso correr con precaución y teniendo en cuenta los consejos que te ofrecemos a continuación.

Vigila las temperaturas

Evidentemente el calor no es el mejor aliado del corredor. Por lo tanto, es conveniente evitar las horas de mayor incidencia solar y aquellas en las que la sensación térmica puede malograr nuestra carrera. Además así limitarás la posibilidad de sufrir un golpe de calor.

Emplea protección solar

Aunque no salgas a correr a las dos del mediodía, en verano, el sol permanece visible durante unas 14 horas. Por lo tanto, debes usar cremas de protección especialmente indicadas para practicar deporte. Estas deberían ser especialmente resistentes al agua y al sudor.

La fruta, tu mejor aliada en verano

Tomar aún más fruta durante el verano es importante porque te refrescará y ayudará a mantener un nivel óptimo de hidratación. Además aportará a tu organismo elementos importantes como son vitaminas, minerales y fibra.

Tomar frutas y verduras refuerza la hidratación del cuerpo.

Mide tus fuerzas

Antes de comenzar con tus entrenamientos debes pensar un poco en tu estado físico. Este ha de marcar tus salidas, esto es, su duración e intensidad. Si has estado mucho tiempo parado, planea sesiones sencillas, aumentando ritmo y tiempo de carrera paulatinamente.

Céntrate en la recompensa

Si en efecto llevas mucho tiempo sin realizar este tipo de práctica o, en general, sin realizar ejercicio, es preciso que trabajes en tu mentalidad y actitud frente al trabajo físico. Hoy sabemos que después del ejercicio y por un largo tiempo después del mismo, experimentamos una sensación de bienestar que se explica a través del aumento en nuestros niveles de serotonina (calma), dopamina (placer que engancha) y endorfinas (alegría). Esto te ayudará a mantener una rutina pero lo esencial es que te centres en la satisfacción de sentirte más saludable cada día.

La hidratación es esencial

Esto ya lo sabes pero es preciso recordarlo. Si la hidratación es ya importante en invierno, en verano esesencial. Asegúrate de que tu cuerpo está lo suficientemente hidratado antes, durante y al finalizar la carrera.

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Equípate correctamente

Usa ropa técnica, cómoda y que pese poco. Tu equipo de running de invierno es ahora inservible. Agradecerás hacer una pequeña inversión en prendas claras, transpirables y ligeras.

Correr en compañía

Tener un fiel escudero o escudera durante los entrenamientos de verano hace que el ejercicio sea mucho más ameno. Así también te obligarás a salir a realizar tus rutinas deportivas, ya que tendrás un aliciente para ello.

La humedad también importa

Vigila, además de la temperatura, la humedad. Esta también afecta a tu salud y a tu rendimiento. A más humedad más dificultad para que el sudor salga del cuerpo correctamente. Esto hace que la sensación térmica aumente, generando sensaciones poco agradables durante el ejercicio.

Haz un plan de entrenamiento

Revisa las condiciones climatológicas antes de salir al correr y por supuesto ten en cuenta el terreno de tu tramo de carrera. Quizás debas alterar alguna de estas variantes antes de salir a correr.

Disfruta de cada carrera

Lo importante es disfrutar de esta práctica, así que no te pongas objetivos muy serios y aprovecha cada carrera. Si estás empezando o las condiciones no acompañan, puedes bajar tu ritmo y vivir la experiencia de una forma algo más relajada.