Gracias, Irene

Hoy no sólo toca pensar en mañana y el futuro que queremos, toca echar la vista atrás. Y no puedo hacer otra cosa que decir, gritar: «Gracias, Irene». Estaba ilusionadísima porque por primera vez iba a poder hacer un «voto de premio». Por ti, por todo lo que has hecho por nosotras, por haber conseguido que ésta sea la legislatura y la España más progresista de la historia, por dar ejemplo hasta ante Europa. Y, precisamente, porque tu trabajo ha sido tan feminista, no voy a poder votarte.

Te vetaron porque incomodabas, porque hiciste temblar suelos y cimientos apuntalados desde hace siglos. Muchos hombres se han sentido no sólo intimidados, sino atacados y discriminados por tu política, cuando lo único que hacías es tu trabajo: luchar por la igualdad, por nosotras, por el colectivo LGTBIQ+ y ‘les trans’, y por hacerlo ya porque era urgente. Parte de la sociedad no ha sabido encajarlo, porque viven anquilosados en una realidad que controlan y les valida; a nosotras no.

Nunca antes me había sentido tan tranquila volviendo a casa como desde que se aprobó la ley de ‘sólo sí es sí’. Una vez más, gracias, Irene. Nunca me había sentido tan representada por ningún ni ninguna política española. Por ti sí, porque tú has estado con nosotras decenas de veces antes protestando y gritando en las calles, secundando las huelgas y manifestaciones feministas. Eres una de nosotras y por fin tenías la oportunidad de cambiar lo que entraba dentro de tu parcela y has cumplido.

Obviamente, tu gestión no ha sido perfecta y no ha englobado a todos los colectivos necesarios en su justa medida. El Encuentro Internacional Feminista de febrero dejó mucho que desear, pero era el primer acto de estas características que se convocaba y financiaba desde el Gobierno y es un gran paso el mero hecho de que haya existido. Sin duda, nos dejas ante una España más sana y realista, el primer país en contar oficialmente el número de feminicidios, de muertes por violencia machista, porque ese es su nombre.

Tan solo puedo agradecerte e intentar transmitirte cuán orgullosa estoy de todo lo que tu equipo y tú habéis hecho, de vuestra valentía, arrojo y coraje desde mi humilde columna, porque nos habéis dado más fuerza para seguir luchando contra lo que venga. Porque el futuro será feminista o no será.

*Escritora

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