Algunos contemplábamos este año las semanas previas a la campaña de Navidad cómo iban construyendo el arco de luces de la calle Cruz Conde. Incluso a los más talluditos se nos venía a la mente de manera refleja aquella de «Llega la Navidad con sabor de mazapán /De turrón, de mieles y de pan/ Vamos a celebrar la familia en el hogar/ Nuestra Nochebuena una vez más...». Aquellas estrofas de la famosa canción de Miliki se nos habían quedado enredadas en la memoria de ese mismo espectáculo navideño que nuestro Ayuntamiento había organizado en anteriores ediciones. Este año además veíamos en el montaje previo con ilusión como nuestro consistorio iba añadiendo unos metros más al arco de luces con sus correspondientes altavoces. Y como se esperaba llegó el día de la inauguración. Y las luces comenzaron a enhebrar la noche de magia y el sonido conjuro las melodías: ‘El Last Christmas’, de Ariana Grande abrió el espectáculo de Iluminaciones Ximénez, y algunos pensamos que aquello prometía pues esta era una canción que pudimos escuchar en 2019. Después vino la novedad, que siempre es bueno innovar para que no nos acusen de conservadores y tras la primera sonó el clásico villancico ‘Jingle Bell’. Y ahí se quedó la cosa. Bueno... todavía quedaba el segundo pase que por cierto llegó con retraso y con un volumen más moderado y allí estaba para el turno de ‘All I want for Christmas is You’, de Mariah Carey. Un servidor se alejó ese día mohíno y taciturno del manto de luces con su inglés de la EGB maltratado y con el reproche tal vez consistorial y quizá por toda aquella gente joven que bailaba bajo las luces con entusiasmo al ritmo de los villancicos anglosajones de ¡carca! Ni Miliki; ni llega la Navidad; ni mazapán y no digamos turrón; y mucho menos Nochebuena. A nadie he hecho esta confesión. Solo a Usted querido lector/a pues al menos para eso es la Navidad: para tener licencia sentimentalista. Pero en fin... a la fuerza ahorcan. ¡Feliz Christmas!.

** Mediador y coach