Los boletus edulis, conocidos comúnmente como hongo blanco o seta calabaza (o, simplemente, calabaza), son uno de los productos micológicos más populares de nuestro país. Son fáciles de recoger, sencillas de diferenciar de las setas tóxicas y muy sabrosas. Además, las más grandes pueden llegar a pesar hasta un kilo.

Incorporar este ingrediente a nuestra cocina es más fácil de lo que parece. A pesar de la potencia de su sabor, admite mucho juego a la hora de mezclarse con otros alimentos en diferentes comidas y preparaciones. Hoy os traemos cuatro ejemplos para que empecéis a experimentar, si no lo habéis hecho ya, con los boletus eduiles en vuestra cocina.

Revuelto de seta calabaza

Una de las preparaciones más populares para las setas de todo tipo. Estas combinan especialmente bien con el huevo, así que las tortillas y revueltos son de sus recetas más comunes.

Ingredientes

  • Boletus edulis: 2 de tamaño mediano
  • Huevos: 3
  • Aceite de oliva: un chorrito
  • Sal
  • Pimienta
  • Perejil
  • Especias al gusto

Preparación

  • Lava y trocea las setas. Échalas en una sartén con un chorrito de aceite de oliva y saltéalas. Salpimenta.
  • Bate los huevos e incorpóralos poco a poco a la sartén. Removemos poco a poco buscando la textura que queremos.
  • Añade el perejil y, si quieres 'tunear' el sabor, ponle las especias que quieras.
  • Para hacer la receta más 'gourmet' podemos incorporar otros elementos, como cebolla pochada o nata, que modificarán el sabor y la textura del plato.

Tosta de boletus y cebolla caramelizada

Una opción deliciosa que explota los contrastes entre el fuerte sabor de las setas y el dulzor de la cebolla.

Ingredientes

  • Cebollas: 3
  • Boletus edulis: 3
  • Azúcar: 4 cucharadas soperas y media
  • Aceite de oliva: un chorrito
  • Agua: un chorrito
  • Vinagre de Módena: un chorrito
  • Rebanadas de pan

Preparación

  • Lavamos y troceamos las setas en pedazos pequeños. Salteamos en una sartén con aceite y reservamos.
  • Cortamos las cebollas en juliana. Las echamos en una sartén con un chorrito de aceite, espolvoreamos un poco de sal y tapamos para cocinar a fuego muy lento durante 30 minutos.
  • Una vez la cebolla esté casi transparente, agregamos el azúcar y subimos el fuego hasta que esté fuerte.
  • Removemos constantemente hasta que tome un color dorado. Añadimos el vinagre de Módena. Si en algunos puntos la cebolla se espesa demasiado, podemos echar un chorrito de agua.
  • Retiramos del fuego, dejamos reposar y, pasado un rato, retiramos con una cuchara el aceite sobrante.
  • Tostamos ligeramente las rebanadas de pan para hacer las tostas.
  • Ponemos sobre las tostas los pedazos de seta y añadimos la cebolla caramelizada.

Crema de boletus

Las cremas y purés son una opción fácil y cómoda para preparar algunos alimentos. Además, son típicas del otoño, donde predominan sabores como las castañas o la calabaza.

Ingredientes

  • Boletus: 3
  • Ajo: 1 diente
  • Harina: 50 gramos
  • Nata: 20 mililitros
  • Aceite de oliva: un chorrito
  • Agua
  • Sal

Preparación

  • Pica la cebolla finita y sofríela con el diente de ajo en una sartén con un chorrito de aceite.
  • Cuando se esté pochando añadimos la harina, la nata, una pizca de sal y el agua.
  • Dejamos que se cocine durante unos 10 minutos y después lo pasamos todo por la batidora para convertirlo en una crema fina.

Pimientos rellenos de boletus

Una exquisita combinación de sabores que despierta la afición a las setas incluso en aquellos que en un principio eran reticentes.

Ingredientes

  • Pimientos: 3
  • Boletus edulis: unos 200 gramos
  • Cebolla: Media
  • Leche: 900 mililitros
  • Aceite de oliva: 100 mililitros
  • Pimienta
  • Sal
  • Nuez moscada

Preparación

  • Pica la cebolla en pequeños dados y fríela en una sartén con aceite.
  • Mientras se cocina la cebolla, parte en pequeños trozos los boletus. Incorpóralos a la sartén y saltea durante 5 minutos.
  • Añadimos harina y leche poco a poco, ajustando la textura. Cuando tenga la consistencia deseada, añade la sal, la pimienta y la nuez moscada.
  • Deja reposar la masa resultante y, cuando se haya enfriado, úsala para rellenar los pimientos ya lavados y vaciados. Fríelos en una sartén durante unos 10 minutos para terminar el plato.