Es uno de los platos típicos y más reconocibles de la gastronomía cordobesa, especialmente para los autóctonos que cada temporada celebran el montaje de los puestos de caracoles en la capital como prólogo a una primavera temprana en Córdoba.
La temporada de caracoles ya está aquí, y desde el lunes 17 de febrero y hasta el 13 de junio, a las puertas del verano, cordobeses y visitantes podrán degustar este manjar en sus diferentes variantes que van desde los clásicos chicos o gordos con caldo o salsa, a recetas más internacionales que se han popularizado en los últimos años en un afán por innovar las recetas y atraer a todo tipo de paladares.
Encumbrados como tradición cordobesa, quizás muchos no conozcan de dónde viene la costumbre de comer caracoles en Córdoba, pues aunque este producto también está presente esta temporada en la restauración de otras provincias, como Jaén o Sevilla, hay una forma característica y cordobesa de comer caracoles.
Para localizar el origen del gusto por esta materia prima no hay que irse muy lejos y está en las huertas que rodearon hace décadas la capital (y que aún se pueden localizar en algunas zonas) y en la que la presencia de este molusco era abundante. De ahí que fuese alimento de consumo habitual en los hogares cordobeses y que los vendedores ambulantes comerciasen con los caracoles.
Para encontrar los primeros caracoleros y puestos de venta como los que hoy día se distribuyen por la capital hubo que esperar hasta mediados del pasado siglo XX, concretamente en los años 60, cuando se instalaron los primeros puestos en las zonas de la periferia. A mediados de esa década, en 1965, se instala en la Plaza de la Magdalena el puesto de caracoles más veterano de la capital.
A diferencia de los caracoles de otras provincias, aunque este plato también puede encontrarse en la carta de muchos bares y tabernas de Córdoba, la forma típica de tomar caracoles en la capital es acudir a uno de los muchos puestos dispuestos por las plazas y avenidas de diferentes barrios de la capital –que este 2022 son 36- y degustar el plato en la barra o en la mesa con la bebida. Y, ojo, que solo se sirven caracoles.
Temporada 2023
Con más de sesenta años de tradición a sus espaldas, los caracoleros se preparan para una nueva temporada que este año se espera muy animada.
La instalación de los puestos comenzó el 10 de febrero y los fogones están a pleno rendimiento desde el viernes 17 y hasta el final de temporada el 13 de junio.
En total, se han instalado 35 de los 43 puestos autorizados por el Ayuntamiento de Córdoba, y la oferta culinaria incluye este año desde las recetas más tradicionales a variaciones como los los caracoles con tikka masala, tex-mex o al estilo kebab.