La primera Ciudad Internacional de la Gastronomía, gestionada por una empresa española, se apresta a brindar en Lyon (este de Francia) una reflexión sobre la nutrición y el futuro de la cocina.

«Es un centro cultural en torno a la gastronomía que ilustra su historia junto con la alimentación cotidiana, para conversar sobre los objetivos actuales de la alimentación en relación a la salud y la transición ecológica», explica a Efe Florent Bonnetain, director del centro, que abrió sus puertas ayer.

Ubicada en el antiguo hospital Grand Hôtel-Dieu, que ha sanado y visto nacer a miles de lioneses, el visitante dispone de 4.000 metros cuadrados desde la luminosa estancia de la cúpula central coronada por unas cucharas gigantes del artista Vincent Breed.

Carlos Lana, el director de Magma Cultura, la empresa española ganadora del concurso de ideas para llevar a cabo el proyecto, asegura a Efe que su proyecto está alejado de la restauración y que trata la gastronomía en un sentido más amplio. Los amantes de la historia encuentran en la sala Bon Appétit el origen de la gastronomía lionesa, que descansa en la memoria de las madres Brazier y Fillioux.

Las viudas abrieron a finales del siglo XIX sus restaurantes, donde se formó el padre de la nouvelle cuisine, Paul Bocuse, al que se dedica un espacio alrededor de los esculturales fogones donde el chef cocinó sus estrellas.El visitante viaja por la historia del Grand Hôtel-Dieu y los hitos médicos del reputado hospital gracias a reconstrucciones.